El gobierno venezolano no tardó en responder al ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, quien acusó al régimen de Maduro de ejercer "enormes presiones" a la oposición de Venezuela para alcanzar un acuerdo sobre unas elecciones presidenciales sin garantías en República Dominicana y a Maduro de estar en campaña con partidos "no validados y candidatos inhabilitados".
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, acusó en su cuenta de twitter a Muñoz de "perjudicar el proceso de diálogo con burlas previas", de tener una "posición parcializada" y de que "siempre apostó por el fracaso".
El texto del canciller Arreaza también aludió al la decisión de Chile de retirarse del proceso de diálogo que se conduce a tropiezos en República Dominicana.
En efecto, el 31 de enero el ministro Muñoz señaló la suspensión indefinida de su participación como acompañante del diálogo gobierno-oposición hasta que "no se concretan a la brevedad las condiciones entre las partes para la realización de elecciones presidenciales democráticas, transparentes y conforme a estándares internacionales".