El presidente boliviano Evo Morales informó este viernes que Bolivia contrademandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya por las aguas del río Silala.
La contrademanda pide al tribunal internacional que "juzgue y declare que Bolivia tiene soberanía sobre los canales artificiales y los mecanismos de drenaje en el Silala que están ubicados en su territorio, y el derecho soberano a decidir cómo los mantendrá".
2) #Bolivia tiene soberanía sobre el flujo artificial de las aguas del Silala en su territorio y #Chile no tiene derecho a ese flujo. 3) Cualquier entrega de Bolivia a Chile de las aguas del Silala que fluyen artificialmente se sujeta a celebración de un acuerdo específico. pic.twitter.com/CQoNUq3g6b
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 31, 2018
Morales agregó que "Bolivia también protege la integridad de sus recurso hídricos y los humedales de la zona del Silala que por nuestra Constitución son de carácter estratégico y pertenecen al pueblo, pidiendo en su contrademanda se respete su soberanía en el marco del derecho internacional, también de manera pacífica y ante el tribunal judicial más importante del sistema de las Naciones Unidas".
La contrademanda fue presentada por el gobierno altiplánico pese a que en junio de este año, el propio Morales aseguró que no llevaría a cabo dicha acción ante el tribunal internacional, señalando en ese momento que se había descartado por "recomendaciones jurídicas de carácter internacional".
[LEE TAMBIÉN] Los argumentos de Chile en la demanda por el Silala
Entrega de contramemoria
En tanto, el agente boliviano ante La Haya, Eduardo Rodríguez Veltzé, además entregó la contramemoria del proceso ante la CIJ, según Morales, "presentó ante la secretaría de ese Tribunal la contramemoria de Bolivia, dentro del juicio iniciado por la República de Chile sobre la naturaleza y el uso de las aguas de los manantiales del Silala".
Según Chile esas aguas, que fluyen a su territorio desde hace más de un siglo, provienen de un río internacional compartido, mientras que Bolivia señala que son producto de manantiales canalizados artificialmente hacia territorio chileno.