La declaración del padre de la denunciante de Monsalve ante PDI: "Me dice llorando: 'él me da asco, yo nunca quise esto'"

El padre de la mujer que denunció al exsubsecretario del Interior Manuel Monsalve declaró ante la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de la PDI el pasado 21 de octubre.

Aquella mañana, el papá de la denunciante reiteró lo que su hija le contó acerca de lo que había ocurrido con el otrora militante socialista, cuando ella lo llamó por teléfono a Curanilahue diez días antes de formalizar sus acusaciones en contra de Monsalve.

La Tercera accedió a la declaración del hombre, quien expuso que su hija le recalcó que ella no había consentido nada de lo que ocurrió, que nunca pensó en acostarse con él y que había sido violada por el exsubsecretario, notando desde un principio la angustia en sus palabras.

De acuerdo con lo relatado por el hombre, su hija comenzó relatando que su jefe, Manuel Monsalve, la había invitado a comer y que ella aceptó porque pensaba que era un encuentro con fines laborales. Le contó que habían tomado un par de pisco sour, pero que cuando iban en el tercero “se le borró su mente”, hasta que despertó al día siguiente en la cama del exdiputado.

Afirmó, de acuerdo con la publicación del periódico, que ella le contó lo de su lesión en la muñeca y que al preguntarle qué había ocurrido al exsubsecretario, éste habría respondido que ella misma se la habría hecho, dándole un beso en la zona.

Y luego agregó: “Mi hija me dice, llorando, ’papá yo no quería hacer nada con él, jamás se me pasó por la cabeza tener relaciones sexuales con esa persona, él me da asco, yo nunca quise esto, me violaron, yo perdí el conocimiento y todo lo que pasó fue sin mi consentimiento, ya que no me acuerdo de nada’”.  

Según su declaración ante la PDI, la mujer le indicó que cuando ella se retiraba del hotel, Monsalve le indicó cómo hacerlo “sin empatía hacia ella” y que él le preguntó por qué había esperado tantos días para contarle lo que había pasado.

“Le pregunté por qué me estaba contando tanto tiempo después, por qué no me había dicho antes, respondiéndome que tenía mucho miedo, ya que su jefe tenía mucho poder; ella no sabía qué hacer, estaba en shock. Yo no quise cuestionarla, y le hice saber que tenía todo mi apoyo (...) Mientras ella me contaba todo lo que le había pasado, estaba llorando mucho, era un llanto desgarrador, con mucha angustiada diciéndome que se sentía sucia”, manifestó.

Las amenazas y el día de la denuncia contra Manuel Monsalve

El padre de la denunciante expuso que ella le comentó que mientras regresaba a su casa seguía sintiéndose mal y que por eso no fue a trabajar el lunes 23 de septiembre, al día siguiente de los hechos.

Ella regresó a la oficina el martes 24, y de acuerdo con la declaración del padre, “lo hizo con mucha pena, diciéndome que le había dado un derrame en sus ojos. Me dijo también que le contó a Ricardo Lillo (...) todo lo que le había sucedido, diciéndole que Manuel Monsalve la había violado. Agregó que ambos se pusieron a llorar, ya que a Ricardo le impactó esta situación, y me dijo igual que él le propuso que contara lo que le había ocurrido, y me parece que él le sugiere que le comentara a la Ministra de la Mujer todo esto, pero mi hija tenía mucho miedo por el poder que Monsalve tenía en el Gobierno; es por ello que en ese momento no quiso hacer nada”.

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Asimismo, manifestó que ese mismo martes su hija también le manifestó lo ocurrido a otra de sus amigas en el gobierno, Catalina Arrey.

Añadió que su hija también manifestó que en los días posteriores Monsalve se contactó en dos oportunidades con ella. “La había llamado dos veces, la primera de ellas por temas de trabajo, momento en que él le sacó el tema. Él le empieza a decir que esa noche ella había intentado bajarse del taxi, pero que entre Manuel y el taxista la había subido de nuevo; le dijo también que ella se había sentado en el asiento de adelante y le insinuó como que ella iba coqueteando con el taxista. Agregó que Manuel le resaltó que esto no se debía saber, ya que le iba afectar su carrera política, e incluso tendría que renunciar, siendo insistente en esto, reiterando que todo lo ocurrido no podía saberse”, afirmó.

“En la segunda ocasión que se topó con Manuel, mi hija quiso tocar el tema, preguntándole textualmente, que si ella iba en el taxi, por qué no la había llevado a su casa, o por qué no la había dejado en otra habitación o llamado a su papá, que ella nunca consintió tener relaciones sexuales, que ella jamás había llegado así a su casa”, continuó.

El hombre también declaró que la mujer le contó que el sábado 28 de septiembre fue al médico, tras lo cual le dieron licencia médica.

“Otra situación que me relató mi hija, es que cuando estaban comiendo, el día que ocurrió todo esto, Monsalve le ofreció pagarle un curso de inglés, situación que ella rechazó”, sostuvo, junto con agregar que ella, posteriormente, se atendió con un psicólogo.

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Lo sucedido, de acuerdo con la declaración del padre, su hija también se lo contó a Ilse Sepúlveda y a Camilo Araneda, ambos funcionarios de Gobierno en ese momento, y también a un amigo de Concepción de nombre Rodrigo.

El hombre relató que el 10 de octubre Sepúlveda fue a la casa de su hija. “Le dice que nos iba a ayudar con esto, nos dice que había hablado con una abogada amiga de ella, y que la abogada le había dicho puras cosas negativas, que tuviéramos cuidado, que lo pensáramos bien porque lo íbamos a hacer era súper difícil debido a que nos enfrentábamos a una persona poderosa, que tenía todos los medios a su favor y que mi hija era una “NN”, que no la conocía nadie, asique tenía pocas posibilidades de que le creyeran”, señaló.

La periodista, según la declaración del padre, le dijo que “se vaya para el extranjero; porque con estos tipos hay que tener cuidado, además le dice que ella conoce a Gabriel de la Fuente, quien era el jefe de gabinete del exsubsecretario, y que él es malo”.

Posterior a esto, el lunes 14 de octubre, él confesó que acompañó a la joven a estampar la denuncia, pero que ella entró sola. 

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