José Antonio Kast (51), diputado por el distrito 24 y ex militante UDI, comenzó su vida en política en sus años universitarios: en 1988 fue consejero de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC).
Ahí estudió la carrera de Derecho y conoció a quien se convirtió en su principal inspiración ideológica: el fallecido senador Jaime Guzmán, fundador del gremialismo y quien lo invitó a formar parte de ese partido.
Kast estudió en el Liceo Alemán. Está casado y tiene nueve hijos. Es católico y parte del Movimiento Schoenstatt.
Fue concejal de la comuna de Buin entre 1996 y 2000 y posteriormente se convirtió en diputado por ese distrito (N°30). En 2013, el parlamentario fue candidato a senador por Santiago Oriente, pero debió bajar su postulación para abrir paso al ex ministro de Obras Públicas de Sebastián Piñera, Laurence Golborne, quien, sin embargo, salió derrotado en las elecciones.
A cambio de su fallida postulación a la Cámara Alta, decidió competir como diputado al distrito 24, cargo que ostenta hasta el día de hoy y que dejará en marzo próximo.
La compleja salida UDI
El 31 de mayo de 2016, se desafilió de la UDI, tras anunciar sus intenciones de convertirse en candidato presidencial. Sin respaldos para una aventura personal dentro del partido, Kast se fue de la tienda cuestionando a la directiva que encabezaba, en ese entonces, el senador Hernán Larraín.
Entre sus críticas, el diputado fustigó la forma en que la mesa había enfrentado los escándalos por el financiamiento irregular de la política.
Una vez fuera de la UDI, José Antonio Kast logró reunir más de 30 mil firmas para convertirse en candidato independiente.
Al día de hoy, cuenta con el apoyo del diputado Arturo Squella y de la alcaldesa San Bernardo, Nora Cuevas, ambos de su ex partido.
Durante estos meses, el foco de la campaña presidencial del abanderado ha estado marcada un estilo directo.
El parlamentario ha enviado claros mensajes de respaldo a sectores religiosos como los evangélicos y también al mundo militar.
José Antonio Kast se comprometió a eliminar la recientemente aprobada ley de despenalización del aborto en tres causales, en caso de llegar a La Moneda.
Además, en materia de seguridad ciudadana, ha impulsado la tenencia de armas para combatir la delincuencia.
“Delincuentes, si entran en mi casa, voy a disparar”, sentenció en una entrevista, lo que generó críticas de distintos sectores políticos.
Tanto en Chile Vamos como en el comando de Sebastián Piñera advierten que su campaña será perjudicial para las aspiraciones del ex Presidente, pero no decisiva.
Si bien admiten que podría quitar respaldos de sectores más conservadores en la primera vuelta, aspiran a que en un posible balotaje sus respaldos se trasvasijen a la opción del ex Mandatario.
