Un plazo de 90 días se fijó para la investigación contra el senador Manuel José Ossandón por su presunta participación en el delito de tráfico de influencias.
Esto luego que la fiscalía oriente formalizara al parlamentario por su eventual participación en el delito de tráfico de influencias en un negocio de extracción de áridos en el río Maipo.
El caso surgió tras una denuncia realizada por el alcalde de Pirque, Cristián Balmaceda, quien acusó al senador de ejercer presiones en contra suya y de integrantes del concejo municipal en favor de la empresa Cavilú SpA, en la que su hijo Nicolás Ossandón ejercía funciones.
Durante la audiencia el Ministerio Público aseguró que el también ex alcalde de Puente Alto y Pirque habría ejercido "influencias" ante concejales, lo que daba cuenta de que tenía "pleno conocimiento" del rol de su hijo en la empresa.
¿Por qué no se decretaron cautelares?
Porque la ley no le permite al Ministerio Público hacerlo en esta etapa. Esto en el contexto donde Ossandón, en su calidad de parlamentario, cuenta con fuero.
Sí podrá hacerlo una vez que finalice el plazo de investigación de la causa, donde el Ministerio Público podrá acusar a Ossandón de los delitos que se le imputan.
Para esto deberá pedir su desafuero ante la Corte de Apelaciones.
Las gestiones de Ossandón en favor de su hijo
En este sentido, se detalló que en octubre de 2017 Ossandón se presentó en una sesión ordinaria de la municipalidad de Pirque -pese a que su asistencia había sido rechazada por el concejo municipal- donde abordó la "conveniencia" de permanecer en un sistema de administración conjunta de áridos en el río Maipo, entre los municipios de Pirque y Puente Alto, lo cual favorecería a Cavilú, empresa "de la cual era accionista su hijo" a través de una sociedad relacionada.
Luego, detalló el Ministerio Público, Ossandón habría intercedido ante el alcalde Balmaceda para pedirle ejercer una prórroga de un plazo de permisos ambientales que requería la firma Cavilú.
Junto con esto, habría llamado por teléfono al concejal Patricio Domínguez para pedirle que recibiera a su hijo. Este le habría respondido que cualquier petición tenía que realizarse dentro del marco de la ley del lobby.
Adicionalmente, se habría reunido con la concejal María Inés Mujica en un café ubicado en el supermercado Montserrat de Calle Ramón Subercaseaux, en la comuna de Pirque, y donde "le señaló que la prórroga era positiva porque ayudaba a Pirque".
Y se detalló que los días 23 y 30 de agosto de 2018, y el día 18 de octubre -día de la audiencia en que se analizó la solicitud de prórroga- el alcalde Balmaceda recibió numerosos mensajes de Ossandón "en tono amenazante, acusándole una animadversión hacia Cavilú".
Y le habría dicho que de no prosperar la prórroga "tomaría contacto con otras autoridades para que lo investigaran penalmente por otros hechos".
Ese 18 de octubre el municipio rechazó la prórroga solicitada por Cavilú. Tras esto, Ossandón le habría escrito a Balmaceda: "hoy terminaste de reventar al Nico, debes estar contento. Tienes una nueva víctima de 23 años"
Todos estos antecedentes, aseguró el Ministerio Público, "claramente demuestran que el senador tenía pleno conocimiento que su hijo tenía participación en Cavilú".
Es por ello que se le formalizó por el presunto delito de tráfico de influencias al haber ejercido "influencias en favor de su hijo" a partir de los cargos que había ostentado previamente -fue alcalde de Puente Alto y Pirque- y teniendo calidad de familiar de Balmaceda.
Con respecto a las acusaciones en su contra, Ossandón ha descartado los delitos que se le imputan: "Voy a comprobar que jamás he hecho ningún tráfico de influencias y que esto es una vendetta política y lo voy a demostrar", aseguró cuando se conoció su formalizacióm.
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