Contraloría indaga año sabático de Elisa Loncon y pide antecedentes a la Usach
Qué observar. Tras un requerimiento de diputados de la UDI, presentado el 4 de abril, Contraloría se encuentra realizando una indagatoria para determinar si el año sabático remunerado otorgado por la Universidad de Santiago de Chile (Usach) a la académica del plantel y expresidenta de la Convención Constitucional, Elisa Loncon, cumple con la normativa.
- A inicios de esta semana el organismo, que dirige como subrogante Dorothy Pérez, envió un oficio a la Usach, cuyo rector es Rodrigo Vidal, con una serie de preguntas sobre los antecedentes que respalden el beneficio entregado a Loncon.
- Según el reglamento interno de la universidad -decreto 372 de 1998- “los integrantes del cuerpo académico de la Usach con jerarquía de profesor tendrán derecho a un permiso sabático de un año de duración por cada seis años de servicios completos e ininterrumpidos en la Corporación”.
- El reglamento establece que la solicitud debe ser presentada por escrito “con una antelación mínima de 90 días” y que en el caso de haber desempeñado previamente comisiones de servicio superiores a un año, “el académico deberá completar otros seis años de servicios completos e ininterrumpidos antes de impetrar nuevamente la franquicia”.
Rechazan cautela de garantía solicitada por alcalde Jadue contra la fiscalía
El oficio de Contraloría. En su requerimiento, Contraloría solicita a la Usach aclarar varios puntos respecto al beneficio, entre ellos:
- Si se elaboró un informe que acredite que Loncon cumplía los requisitos para obtener el año sabático.
- Aclarar qué se entiende por los 6 años previos de servicio completos e ininterrumpidos.
- Si la académica había obtenido permisos anteriores a la solicitud.
- Si existe alguna causal para entregar el beneficio del sabático cuando no se cumplen los requisitos establecidos en el reglamento.
Permiso como constituyente. La Usach publicó el 2 de abril un informe con las actividades académicas desarrolladas por Loncon en los últimos cinco años.
- Esto luego de un año y medio de un proceso judicial debido a que la ex constituyente no estaba de acuerdo con que la universidad entregara la información argumentando que se trataba de antecedentes privados.
- Finalmente, el 28 de marzo la Corte de Apelaciones de Santiago ordenó a la Usach entregar los datos, señalando que la labor de los académicos de una universidad estatal es información pública.
- En el informe académico se observa que Loncon realizó clases y tutorías hasta fines de 2020. A partir de 2021 no registra más actividades de docencia, aunque sí un proyecto Fondecyt adjudicado ese año titulado “Terminología Mapuche del Ámbito Pedagógico: Estudio de los Neologismos desde las Perspectivas Lingüística, Cultural y Política”.
- Durante 2021, la Usach le otorgó un permiso no remunerado para que sus labores primero como candidata y luego como presidenta y miembro de la Convención Constitucional, cargo que concluyó el 4 de julio de 2022.
- El 8 de julio de 2022, y con un informe favorable del entonces rector Juan Manuel Zolezzi, el Consejo de la Facultad de Humanidades, resolvió de forma unánime otorgarle un año sabático remunerado, hasta julio de 2023.
- Según las actas, entre los argumentos se consideró las diversas actividades de difusión, proyectos de escritura e invitaciones que había recibido Loncon, lo que “implica mostrar presencia de la universidad con una figura muy potente en lo académico y protagonista en procesos sociales”.
Fin al misterio: Sichel transmite que competirá en elecciones de Santiago, la madre de todas las batallas
Debate universitario. En la rectoría de Rodrigo Vidal se ha evaluado abrir un sumario interno para determinar si el sabático otorgado durante la administración anterior se ajustó a las normas. Sin embargo, por el momento, han desechado adoptar esa medida.
- Están a la espera del informe de Contraloría que eventualmente podría instruir un proceso disciplinario y ordenar restituir los fondos correspondientes al año sabático.
- Entre los defensores de Loncon señalan que se podría argumentar la autonomía universitaria para entregar el beneficio, así como justificar que el año de permiso en que estuvo trabajando en la Convención puede ser considerado labor académica. En tal caso no habría interrupción de servicios en la Corporación.