Rodrigo Fernández, embajador de Chile en Israel, salió al paso de las críticas tras la visita de Sebastián Piñera a Jerusalén.
Esto luego que Israel protestara ante Chile después de que el Mandatario visitara junto al ministro para los asuntos de Jerusalén de la Autoridad Nacional Palestina, Fadi Al-Hadami, el complejo de la mezquita Al Aqsa, conocida por los judíos como el Monte del Templo y ubicada sobre el Muro de las Lamentos, y cuyo estatus es uno de los asuntos más sensibles del conflicto entre israelíes y palestinos.
Se trata del lugar más sagrado del judaísmo y el tercer lugar santo del islam, después de la Meca y Medina, administrado por la fundación musulmana Waqf y protegido por la policía israelí..
Según el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Israel Katz, el embajador chileno Rodrigo Fernández recibió la queja por la visita de Piñera "en violación de las regulaciones y un acuerdo previo".
Previo a ello, las comunidades palestinas habían reclamado por la presencia del embajador de Israel en Chile, Eldad Hayet, en la visita de Piñera al Monte de los Olivos.
Al respecto, Fernández aclaró que "el acuerdo con ambos gobiernos era que, durante la visita del Presidente Piñera a la ciudad antigua de Jerusalén, no participarían autoridades de ninguno de ambos gobiernos"
"El hecho que finalmente participaran autoridades políticas es un hecho que no era ni conocido ni mucho menos consentido por Cancillería chilena", aseguró la autoridad.
En tanto, Gabriel Silber, quien formó parte de la gira, explicó que "lo que había originalmente diseñado era que el Presidente Piñera y su delegación hubiese visitado Jerusalén sin ningún tipo de autoridad, tanto israelí como de la autoridad nacional palestina"
"En los hechos esto no ocurrió, tanto por parte de Israel fue acompañado del embajador como por un ministro en el caso de la autoridad palestina y eso ha generado entre ambos Estados una serie de roces y notas diplomáticas", agregó el legislador DC, quien es integrante del grupo chileno israelí.
