El complejo escenario que enfrenta la despenalización del aborto al llegar a Comisión Mixta
Un voto de abstención del diputado DC, Marcelo Chavez, provocó que el proyecto de despenalización del aborto en tres causales pasara a Comisión Mixta y no fuera despachado del Congreso este mismo jueves.
En la votación en la Cámara de Diputados se debían aprobar dos modificaciones que habían sido hechas en el paso del proyecto por el Senado: uno que fue aprobado y el segundo que fue rechazado por la falta de quórum ─pese a que obtuvo mayoría simple con 66 a favor y 45 en contra, y una abstención─.
Dicho artículo tenía categoría de ley orgánica constitucional, por lo que requería al menos 67 votos para ser aprobada. La modificación decía relación con las medidas de protección para las menores de 14 años que puedan solicitar un permiso a un juez para abortar sin el consentimiento de sus padres.
Ahora, el proyecto pasará a Comisión Mixta, donde deberá ser rediscutido ese articulado.
Precisamente era este era el escenario que el gobierno buscaba evitar: el paso del proyecto a Comisión Mixta podría generar un retraso para que sea aprobado y despachado a ley, considerando que la próxima semana es distrital.
Y con eso, se cumplirá el mayor miedo del oficialismo, luego de que Chile Vamos anunciara que enviará un requerimiento al Tribunal Constitucional.
Lo que buscaba el gobierno era apurar la tramitación del proyecto, para que una vez llegado al TC, fuera el actual presidente del tribunal ─Carlos Carmona, cercano al oficialismo─, quien decidiera el futuro de la ley. Esto, ya que el presidente de TC es quien tiene la facultad del voto dirimente en caso de empate. Un escenario bastante probable en un tribunal con 10 integrantes.
Sin embargo, ahora con su paso por la Comisión Mixta, el proyecto podría ser despachado a ley incluso en septiembre, señalaron algunos diputados al salir de la votación. Y con esto, el escenario del proyecto cambia rotundamente, ya que para ese entonces el presidente del TC será Iván Aróstica─ quien se desempeñó como jefe de la división jurídica del Ministerio del Interior del gobierno de Sebastián Piñera, quien luego lo nombró integrante del TC─ el encargado de definir la constitucionalidad, o no, de la ley.