Este jueves se publicaron los resultados de la última Encuesta CEP correspondiente al mes de abril, la cual arrojó, entre otros datos, los peores resultados en la evaluación de la opinión pública a la gestión del gobierno de Michelle Bachelet. Según el informe, la aprobación a la conducción alcanzó su piso histórico situándose en 29%, mientras la desaprobación marcó 56%.
Entre la última medición y la publicada el jueves la aprobación cayó 9 puntos porcentuales (equivalentes a un 23,7% de la aprobación anterior), mientras la desaprobación se disparó 13 puntos, pasando de 43% a 56% en solo cinco meses.
Luego de la explosión del Caso Caval -en el que se vio involucrado su hijo, Sebastián Dávalos- los indicadores no han hecho más que dispararse. Por un lado, en la medición de Adimark la aprobación cayó sistemáticamente hasta llegar al 31% en la última publicación: su registro más bajo.
La desaprobación en esta misma encuesta, por otro lado, ha crecido considerablemente a una tasa mensual promedio de 9,3 y 5 puntos porcentuales, pasando de 49% en enero a 64% en abril.
Tal como lo dijo Bachelet esta semana en entrevista a Canal 13 con Mario Kreutzberger, el escándalo del crédito bancario faciltado a la empresa de su nuera impactó fuertemente a su credibilidad y se tradujo en malos resultados en la opinión pública. "(El Caso Caval) ha sido muy duro porque la gente no me creyó", confesó la presidenta.
A esto hay que sumar las polémicas de los casos Penta y SQM que, en distinta medida, impactaron a la gran mayoría del espectro político, afectando a la credibilidad de la clase dirigencial.