El pago de 10 millones de pesos –en 10 cuotas–, la fijación de domicilio y la firma mensual durante un año fueron las condiciones a las que se sometió el ex diputado Alberto Cardemil, en una suspensión condicional de su procedimiento, para dar por concluida su proceso penal en el contexto del caso Penta.
“La suspensión condicional implica que no hay condena ni absolución, (pese a que) nosotros confirmamos la inocencia y optamos por la suspensión condicional para evitar las consecuencias negativas de un juicio que, de existir, se prolongaría por muchos meses”, manifestó el abogado y vicepresidente de RN Eduardo Riquelme, defensor del otrora legislador.
El delito por el que el Ministerio Público investigó a Cardemil fue la facilitación de dos boletas ideológicamente falsas por un monto total de 10 millones de pesos, documentos tributarios que fueron emitidos al grupo Penta.
El ex diputado deberá cumplir con estas medidas por el plazo de un año. Si esto no se cumple, podría reanudarse el proceso penal en su contra.
El fiscal de la Unidad de Delitos de Alta Complejidad de la zona Oriente, Pablo Norambuena, manifestó que como Cardemil no enfrentaba “una pena que superara los tres años de privación de libertad, al tener irreprochable conducta anterior, y al cumplir con los requisitos legales para una suspensión condicional del procedimiento, la fiscalía lo que propuso al tribunal fue de que se obligara a pagar una indemnización al fisco de Chile de 10 millones de pesos”. Esta salida alternativa fue aceptada por el Octavo Juzgado de Garantía.
