Polémica ha generado el rol que habría tenido el embajador de Brasil, Jaime Gazmuri, en una carta firmada por el PS el pasado 28 de diciembre en solidaridad con la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff y el Partido de los Trabajadores (PT) en el marco del complejo momento que atraviesan tras investigaciones por presunta corrupción.
Según publicó El Mercurio ayer, la misiva habría sido redactada a petición del embajador Gazmuri, quien a su vez le habría comentado la acción habría sido solicitada por el canciller brasileño, Mauro Viera
Tras la publicación, parlamentarios salieron a pedir explicaciones a la cancillería. Incluso el diputado PPD Jorge Tarud anunció que pedirá a la comisión de RR.EE citar al ministro para explicar el rol del diplomático.
Hoy, al ser consultado sobre la publicación, el canciller fue enfático en que “las relaciones que chile mantiene con otros estados están a cargo de la cancillería y de nadie más, los partidos pueden tener sus vínculos con sus contrapartes internacionales y eso les compete a ellos, pero las relaciones entre estado y estado las maneja esta cancillería”.
“No tengo más antecedentes excepto lo que ha manifestado y me ha explicado el propio embajador (Gazmuri), que estuvo hace tres meses acá. Lo invitaron del PS a conversar sobre la situación de Brasil aceptó esa invitación y punto”, dijo.
Muñoz manifestó que “es absolutamente absurdo pensar en una versión respecto a que el canciller de Brasil le habría pedido (al embajador Gazmuri) interceder ante un partido político de otro país para que se pronunciara sobre asuntos internos de Brasil”.
“La diplomacia brasileña es seria y profesional y yo he estado en contacto con el canciller brasileño y por cierto él no me ha hecho ninguna solicitud de esa naturaleza ni me ha mencionado algo tan poco creíble como esa situación. Lo descarto y estos temas hay que tratarlos con seriedad”, concluyó.
La versión del PS
La presidenta del PS, Isabel Allende, aseguró que en diciembre invitó a Gazmuri para que les entregara su visión sobre la situación de Brasil. Tras ello, "la mesa del Partido Socialista tomó la decisión, como partido, de hacer una carta donde se expresa que nosotros no compartimos la desestabilización a un gobierno elegido democráticamente”.
“Nosotros enviamos esta carta firmada por la presidenta y por el secretario general del PS directamente al Partido de los Trabajadores, y por lo tanto nada tuvo que ver el canciller de Brasil o que le haya solicitado a nuestro embajador, para que le pidiera al PS una carta al respecto. Eso es faltar a la verdad”, manifestó.