Un llamado telefónico realizó esta mañana el ministro de Justicia, Jaime Campos, a la vocera de Gobierno, Paula Narváez. El objetivo: hacer un mea culpa luego de dos frases que han sido calificadas como "inadecuadas" por el Ejecutivo.
La primera de ellas ocurrió el martes durante una sesión especial por la crisis del Sename. En la Sala de la Cámara de Diputados, Campos aseguró haber ido a visitar el centro Galvarino, lugar donde murió la menor Lissette Villa, de 11 años, y por la cual el Ministerio Público indaga presuntos apremios ilegítimos.
“En base a las informaciones de prensa y a lo que dicen algunos parlamentarios, pensé encontrar un orfelinato de esos que narraba Charles Dickens en las novelas del 1800 y no encontré eso. Encontré un centro ordenado, limpio, pequeño, no vi los hacinamientos que algunos le atribuyen y, perdónenme, tenía hartas más comodidades que yo tuve en el internado Liceo de Hombres de Talca", sentenció.
La frase de campos le generó una dura réplica por parte del diputado Gabriel Boric, quien lo mandó "a la cresta". Pero no sólo eso: al día siguiente fueron varios los parlamentarios, tanto de oficialismo como de oposición, que rechazaron las declaraciones del titular de Justicia. Incluso hubo quienes lo emplazaron a dar un paso al costado.
Pero campos sumó una nueva polémica ayer, luego que un grupo de gendarmes lo abordara para pedirle una audiencia para abordar las dificultades del gremio.
"Si tú crees que van a establecer un dialogo directo con el ministro para conversar estas u otras tremas, te digo desde ya que estás equivocado. El ministro interviene por el director general. Perdónenme las damas aquí presentes. En una institución jerarquizada como la de ustedes, las bolas del director general están puestas las 24 horas del día en la mesa del ministro de Justicia", afirmó.
Consultada sobre la postura del gobierno frente a estas dos frases, la vocera de gobierno aseguró que "el ministro Campos me ha llamado por teléfono hace un momento atrás para reconocer de que esas declaraciones son totalmente inadecuadas, que van en contra de lo que el quería expresar. El está consciente de que estos dichos no corresponden, que son inapropiados. El gobierno comparte ese juicio".
Investigación de la fiscalía a campaña de Bachelet
La portavoz del gobierno fue consultada además sobre el oficio que envió el fiscal del caso SQM, Pablo Gómez, al Servel donde solicita antecedentes vinculados a la campaña presidencial de Michelle Bachelet. Hasta ahora las diligencias habían apuntado a la denominada “precampaña”, luego que se detectara que la firma Asesorías y Negocios, del operador Giorgio Martelli, había recibido pagos de SQM Salar.
Consultada sobre estas indagatorias, la ministra dijo que "esto es propio del trabajo normal de dos instituciones autónomas del Estado, y por lo tanto al gobierno, ustedes lo saben, no puede ni debe referirse a un proceso que desarrollan dos entidades autónomas del Estado".
"El gobierno respeta el trabajo y la autonomía de las instituciones. Es es lo que corresponde en todo Estado de derecho", remarcó.
-¿Se puede garantizar de parte de La Moneda que no haya existido un solo peso en la campaña de Michelle Bachelet que haya sido conseguido en forma irregular?, se le consultó.
"Esto forma parte de la investigador que está llevando adelante el fiscal. Por supuesto que toda la información está transparente, está debidamente entregada al servicio correspondiente. Cualquier juicio respecto de aquello lo tienen que dar las instancias que corresponda", respondió.
