Un primer revés sufrió el gobierno en la tramitación de la ley corta con que busca subsanar la polémica tras los cambios de domicilio electoral que afectaron a 467 mil personas.
Esto luego que la oposición e independientes no dieran la unanimidad para que la Cámara revisara el proyecto sin que tuviera que pasar por una comisión. En la cita tampoco estuvieron los representantes del Comité de la DC y el PC.
El impasse llevará a que el proyecto tenga que ser revisado por la Comisión de Gobierno interior, una vez que se dé cuenta del ingreso de la iniciativa en la Sala, lo que está programado para las 16 horas.
Luego de la cuenta, se deberá esperar una hora para que sesione la comisión. Luego de una hora -o sea las 18:00- el proyecto podrá volver a la Sala.
De no haber unanimidad, la discusión quedará para el día siguiente, lo que complica los planes del Ejecutivo de tener despachado el proyecto durante este lunes para su posterior revisión por parte del TC.
Oposición acusa "premura increíble"
Las bancadas de la oposición defendieron su decisión de no dar la unanimidad, forzando que el proyecto llegara a la Comisión de Gobierno.
"Nosotros vamos a ceñirnos al reglamento y vamos a tramitar el proyecto de buena forma", manifestó el diputado RN Germán Becker.
Por su parte, el UDI Juan Antonio Coloma manifestó que "lo que nos pide el gobierno a través de la mesa de la Cámara es no tramitar en comisiones, lo que significa no escuchar al Servel, no escuchar al Registro Civil. Eso es impresentable".
"El gobierno conocía hace dos años de estos hechos, el Servel informó en 2014 que se estaban realizando modificaciones al padrón. Hubo reuniones en julio de este año y se optó por no hacer nada. La ministra en agosto tuvo conocimiento de los hechos y no hizo nada", agregó.