"Oye, ya pues", reclamó Sebastián Piñera Morel, hijo del ex Presidente, en medio del salón acondicionado para los invitados de los dos candidatos presidenciales que participaron en el debate convocado por Anatel.
Piñera Morel exigía silencio a los acompañantes de Alejandro Guillier, que cada ciertos minutos lanzaban risotadas y críticas contra el candidato contenedor, lo que se replicaba entre el senador y Sebastian Piñera, quienes, unos pasos más allá, se enfrentaban en uno de los estudios de TVN.
A solo seis días de la segunda vuelta, y con la convicción, en ambos comandos, de que el foro televisivo era una oportunidad clave para conquistar los últimos votos indecisos, la tensión entre ambos equipos era evidente y se dejó ver entre los invitados al foro.
Por Sebastián Piñera asistieron al debate, entre otros, su esposa Cecilia Morel y sus cuatro hijos, su jefe político Andrés Chadwick, los senadores Alberto Espina,Francisco Chahuán Nicolás Monckeberg, y el jefe programático, Gonzalo Blumel. Por Alejandro Gullier asistieron, su hijo Andrés Almeida, el presidente del PS y senador electo, Álvaro Elizalde, su jefe programatico Osvaldo Rosales, y varios diputados como Andrés Zaldívar, Camila Vallejo (PC), la diputada electa del PRO, Marisela Santibañez, entre otros.
Durante el debate, el equipo de Guillier evaluó de mala forma la respuesta del senador por la condonación de la deuda del CAE, luego de que se generaran contradicciones entre su propuesta y la explicada por Osvaldo Rosales.
Mientras los rostros del guillierismo evidenciaban incomodidad con la insistencia de la periodista de CNN, Mónica Rincón, quien le exigió a Guillier aclarar si la condonación al 40% más pobre era "para siempre", en el sector de Piñera, el presidente de Evópoli, Francisco Undurraga, lanzaba dardos al senador desde su asiento en el salón: "Por favor, desenchúfate", criticaba por las largas respuestas del legislador.
"Puede haber visiones diferentes entre el jefe programático y el candidato, pero Alejandro Guillier dijo que la condonación era algo permanente y que él sería el presidente y punto, me quedo con lo que dijo el candidato", respondió el presidente de la Cámara de Diputados (PS) Fidel Espinoza, quien también asistió al debate e intentó aclarar la confusión. Y aunque la prensa solicitó hablar con Rosales, este evitó aparecerse ante los periodistas.
De igual forma, en el comando de Piñera valoraron que el ex Presidente pidiera disculpas por una campaña de descalificaciones entre candidatos. "Les ganamos 1-0 a Guillier con eso, él no fue capaz de tener esa altura de miras", comenzó a decir Chahuán en el salón, ante la incomodidad del equipo del senador.
Y en paralelo, el equipo del Guillier lamentaba que el parlamentario fuera consultado por el caso Spiniak y el rol que tuvo cuando se desempeñó como jefe de prensa de Chilevisión, oportunidad en la que apoyó un reportaje en el que al juez Daniel Calvo se le vio frecuentando un sauna gay. En el equipo sintieron que cualquier respuesta de Guillier generaría cuestionamientos.
En la segunda parte del debate; el comando de Guillier se distendió más que en la primera fase, y comenzó a bromear con la performance de Piñera.
"No lo van a soltar en las redes sociales", se burlaba el concejal de Providencia, Jaime Parada, por el error cometido por Piñera, cuando este habló de "oportunistica" en vez de usar la palabra "oportunidad".
A la salida, Piñera respondió por el tono duro que tuvo con el senador durante la última etapa del debate. Entre otros enfrentamientos, Piñera acusó a Guillier de estar "vendiendo humo" con el costo de su programa de gobierno y aseguró que este es imposible de financiar.
"Tenemos grandes diferencias, y siendo este el último debate, era la oportunidad de demostrar las coincidencias, pero también las diferencias", aseguró el ex Presidente.