Durante la ceremonia del Día Nacional de las Iglesias Evangélicas y Protestantes, la Presidenta Michelle Bachelet volvió a reunirse con representantes de ese grupo luego de las polémicas que se dieron en septiembre con críticas por parte de algunos representantes hacia su gobierno por la despenalización del aborto.
Al acto concurrió el obispo Emiliano Soto quien en septiembre se desmarcó de las críticas a Bachelet y hoy agradeció el apoyo durante este gobierno.
Bachelet, en tanto, aseguró que "Chile protege la libertad religiosa de sus habitantes en un plano de igualdad y respeto".
"Hemos logrado que los valores de los distintos credos religiosos, y también de quienes no profesan ninguno, convivan en el espíritu de la amistad cívica. Así debe seguir siendo, porque hemos aprendido que la expresión respetuosa de las convicciones le hace bien a nuestra Patria, y nos enriquece como sociedad", sostuvo.