"Comprendo que, como ex Presidente de Chile, hombre público y expectante posición en los sondeos de opinión pública, sea sometido a un intenso y riguroso escrutinio público. Pero no acepto ni aceptaré jamás que, de manera sesgada y tendenciosa, se intente cuestionar o poner en duda mi absoluta y total voluntad, independencia y dedicación con que, como Presidente de Chile actué en la defensa de los intereses superiores de Chile y los chilenos, y en forma muy especial, en el caso del diferendo limítrofe con Perú".
Con estas palabras el ex Mandatario Sebastián Piñera salió al paso de un reportaje de Radio Biobío en que se señala que el ex Mandatario, a través de la sociedad Bancard, habría estado presente en la propiedad de Exalmar, una de las principales pesqueras de Perú. Esto justo en momentos en que Chile enfrentaba la demanda de Perú ante la Corte Internacional de La Haya, iniciada en enero de 2008 y en la que éste último buscaba modificar el límite marítimo.
En una declaración Pública, Piñera enfatizó que "en abril del año 2009, y antes de asumir una candidatura presidencial, en forma voluntaria e inédita, constituí un fideicomiso ciego, gestionado por cuatro instituciones financieras chilenas reguladas por la Superintendencia de Bancos y Valores de nuestro país, con el propósito de administrar, con absoluta autonomía y sin ninguna información al suscrito, las inversiones financieras en Chile del Grupo Bancard".
"Asimismo, y con igual fecha, me desligué totalmente de la gestión, administración y decisiones de inversión de las empresas del Grupo Bancard, las cuales con total autonomía y sin ninguna participación del suscrito, administran hasta el día de hoy las inversiones del Grupo Bancard en el extranjero", agregó.
La vinculación con el caso
La empresa pesquera Exalmar es la sexta más grande de Perú. Tras su apertura a la bolsa, en noviembre de 2010, fueron varios los empresarios chilenos quienes ingresaron a su propiedad. Uno de ellos habría sido el ex Presidente Sebastián Piñera a través de la sociedad Bancard International Investment, según informó Radio Biobío.
De acuerdo a dicha publicación, existen registros de la pesquera que dan cuenta de que el entonces Mandatario habría estado presente en la propiedad de la pesquera al menos desde agosto de 2012. Esto justo en momentos en que Chile enfrentaba la demanda de Perú ante la Corte Internacional de La Haya, iniciada en enero de 2008 y en la que éste último buscaba modificar el límite marítimo.
El fallo del tribunal internacional, conocido el 27 de enero de 2014, determinó que la frontera entre ambos países comenzaba desde el Hito 1 -añ norte de Arica- hasta las 80 millas marítimas. Desde ese punto, sin embargo, modificó el paralelo defendido por Chile, inclinando el límite hacia el suroeste, aumentando el mar peruano hacia dicha área. Así, el fallo implicó la pérdida de derechos económicos para una zona de 22 mil kilómetros cuadrados.
De acuerdo a la información publicada por Biobío, el ingreso de Piñera a la pesquera peruana se produjo a través del Fondo de Inversiones Privado (FIP) Mediterráneo.
El mismo medio informe que un acta de la junta de accionistas de Exalmar señala que el FIP Mediterráneo tenía el 1,7% de la pesquera en agosto de 2012, participación que ha aumentado al 9,10% a través de Bancard International Investment.
Según Biobío, el FIP Mediterráneo es gestionado por Administradora Bancorp S.A., sociedad administrada por cercanos y familiares del ex Mandatario, como José Cox Donoso, su hermana Magdalena Piñera Echenique, su hijo Sebastián Piñera Morel, Nicolás Noguera Correa, Ana María Délano Abbott, José Ignacio Bravo Eluchans y Santiago Valdés Gutiérrez.
Mientras que la Administradora Bancorp S.A. es controlada por Inversiones Santa Cecilia S.A. e Inversiones Bancorp Limitada, vinculadas también al ex Presidente.
Según Biobío, el gerente general de Bancard, Nicolás Noguera, señaló que “la mayor parte de la inversión del Grupo Bancard en Exalmar se construyó, de manera gradual, con posterioridad a la fecha en que se conoció el fallo de La Haya”. Agregó que dicho fallo “jamás ha sido considerado como un factor de análisis en ésta, ni en ninguna otra inversión del grupo” y que Piñera “no participa en la administración del Grupo Bancard, ni en sus decisiones de inversión, desde abril de 2009”.
En 2009, en plena campaña presidencial, Piñera firmó cuatro fideicomisos ciegos, una medida de carácter voluntaria. En ellos se comprometió a entregar cerca de US$ 400 millones, los que fueron administrados por Celfin Capital, Larraín Vial, Moneda Corredores de Bolsa y el Banco BICE. Dicho mandato, sin embargo, no incluía las sociedades del grupo, ni otras inversiones en el extranjero.