La mañana del 4 de enero de 2013, el entonces Presidente Sebastián Piñera se trasladó hasta Vilcún para visitar a los familiares de Werner Luchsinger y Vivian Mackay. El matrimonio, de 75 y 69 años respectivamente, había fallecido en la madrugada producto de un ataque incendiario en su residencia en la región de la Araucanía.
Ese día, Piñera viajó acompañado de su entonces ministro del Interior, Andrés Chadwick, a quien le correspondió anunciar las acciones judiciales que impulsaría el gobierno, entre ellas, una querella por ley antiterrorista.
Casi cuatros años después, como presidente de la Fundación Avanza Chile - think tank de Piñera-, Chadwick salió a cuestionar con dureza al Instituto de Derechos Humanos (INDH) por la declaración pública que emitió manifestando la preocupación por el estado de salud de la machi Francisca Linconao, imputada por el crimen y que lleva 10 días de huelga de hambre.
En un comunicado de ocho párrafos, el consejo del INDH llamó a "respetar los derechos individuales de los imputados y la presunción de inocencia". Además insta a las autoridades "avanzar en el reconocimiento jurídico y en la adopción de políticas públicas tendientes a hacer efectivos los derechos de los integrantes del pueblo mapuche".
El INDH también "recuerda que el uso de la prisión preventiva debe ser compatible con el principio de presunción de inocencia y el derecho a la libertad personal".
Fue en este contexto que Andrés Chadwick acusó un sesgo político en el declaración del Instituto de Derechos Humanos.
"Es una declaración inédita, que sólo el Instituto de Derechos Humanos la ha hecho en relación a una persona que está siendo imputada por uno de los delitos más sangrientos y crueles cometidos en Chile, como es el asesinato del matrimonio Luchsinger-Mackay", indicó el ex secretario de Estado a T13.cl.
En esa línea, agregó que "lo único que uno piensa al leer la declaración es que le faltó un párrafo final: que todo lo anterior sólo se aplica a las personas que son o están vinculadas a los movimientos de izquierda".
La machi Linconao se encuentra en prisión preventiva desde diciembre pasado por su presunta participación en el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay.