Por Tomás Martínez y Lorena Ferraro
“No han sido días tranquilos”, dijo Patricio Santamaría al ingresar este mediodía a un caluroso salón del segundo piso del edificio del Servicio Electoral, en calle Esmeralda, con una declaración de tres páginas en su mano, que leería más tarde.
La frase de Santamaría reflejaba la sensación del organismo que encabeza tras horas de alta tensión por los errores en el padrón electoral -a raíz del cambio de domicilio electoral involuntario- que afectaría, según el propio Servel, a unos 480 mil votantes. Un episodio que tiene al organismo enfrentado de manera pública con el Registro Civil que, por el contrario, cifró en 17 mil a las personas perjudicadas. En ese grupo sólo considera a quienes fueron cambiados de comuna.
Poco antes de las 13:00 horas Santamaría, flanqueado por los consejeros Alfredo Joignant, Andrés Tagle y Arturo Bulnes, pasó a la ofensiva y anunció que llevaría los antecedentes al Ministerio Público, a una semana de las elecciones municipales, fijadas para el 23 de octubre. Además, el Servicio difundió una serie de oficios que envió desde abril de 2014 al Registro Civil para advertir de las anomalías.
Tras la jugada del Servel, el Gobierno ingresó públicamente a escena. Un par de horas después de que hablara Santamaría, el ministro Marcelo Díaz reveló haber tomado contacto con el presidente del Servel para citarlo a una reunión de emergencia, convocada para este sábado a las 10:00, con los ministros del comité político.
Según fuentes que conocen de los contactos, La Moneda solicitó al Servel una solución efectiva. En concreto, analizar la viabilidad de una "ley corta" para salvar, contra el tiempo, un impasse que complica los comicios comunales.
La alternativa sobre la mesa, según fuentes del oficialismo, es la de instalar una tercera urna que permita votar a quienes fueron cambiados de lugar. La fórmula fue conversada, por ejemplo, en contactos entre el ministro Nicolás Eyzaguirre (Segpres) y los titulares del Senado y la Cámara Baja, Ricardo Lagos Weber y Osvaldo Andrade.
Eyzaguirre sondeó la factibilidad de tramitar una ley corta en el Congreso. Esto pues el Parlamento se vería obligado a suspender la semana distrital, en que no hay sesiones.
Así, dicen funcionarios del Congreso, podría citarse a sesión de la Cámara de Diputados para el lunes en la tarde y avanzar contra el tiempo en la tramitación de la ley express. El siguiente paso es la discusión en el Senado, donde los cálculos apuntan a tener resuelto el asunto a más tardar el martes, para luego enviar el proyecto a la revisión del Tribunal Constitucional el miércoles y ya el jueves que la ley esté publicada.
Consultado sobre la posibilidad de suspender la semana distrital, el presidente de la Cámara, Osvaldo Andrade (PS), afirmó que "al estar a tan sólo 9 días de las elecciones municipales, lo razonable es que nos concentremos en la búsqueda de la solución y reitero la disposición de la Cámara de Diputados para enfrentar una solución que tenga que ver con el ámbito legislativo”.