-¿Cómo afecta esta fuerte derrota del Apruebo al Presidente Boric?
-Sin duda que es una derrota para el gobierno y para el Presidente. La Coalición apoyó la propuesta con fuerza y entusiasmo, y hasta el último minuto argumentó que era una buena ruta para Chile. Analistas diversos y de diferentes persuasiones políticas plantearon, desde hace semanas, que el plebiscito era, también, una evaluación del desempeño del gobierno. Y en ese examen el gobierno sale claramente reprobado.
Habiendo dicho eso, es necesario apreciar el discurso del presidente. Un discurso de unidad en el que se comprometió a jugar, junto al Congreso, un papel fundamental en el proceso que sigue y por medio del cual vamos a escribir un texto que de verdad represente a la gran mayoría del país.
-¿El Partido Comunista es otro de los grandes perdedores? ¿El presidente debe evaluar su alto nivel de influencia en el Gobierno?
-El PC no es “otro gran perdedor.” El PC es “el gran perdedor”. Su estrategia de crear un proyecto indigenista y radical fracasó rotundamente, al punto que se hace necesario para el Presidente Boric reconsiderar su relación con ese partido. Dados los resultados, mantener la cercanía actual entre la administración y el PC es una fórmula segura para seguir perdiendo popularidad y apoyo. No es una exageración decir que el Partido Comunista se ha transformado en el albatros que cuelga del cuello de Gabriel Boric.
-¿Es factible una alianza entre la centroderecha y la centroizquierda para el nuevo proceso constituyente?
-Una gran alianza de centro es absolutamente necesaria. De hecho, es lo que la ciudadanía implícitamente apoyó en le plebiscito. La gran fuerza del Rechazo nace de los Amarillos, de “Una que nos Una” y de otros movimientos que buscan moderación y acuerdos para escribir un texto moderno e inclusivo. Sin un gran acuerdo de centro seguiremos dándonos vueltas sin destino.
Solo en 8 comunas de todo Chile ganó el Apruebo
-¿Cómo debe ser este nuevo camino? ¿Con una Convención o un comité de expertos? ¿De qué manera deben elegirse?
-Es algo que tendrá que decidir el Congreso, haciendo uso de las nuevas reglas de los 4/7. Personalmente creo que debemos hacer una nueva convención, más pequeña, paritaria, elegida bajo el principio estricto de “una persona un voto,” y con una combinación de listas distritales y listas nacionales.
Esta nueva convención debe contratar a un equipo de juristas que trabaje para ella y que redacte, bajo sus órdenes y siguiendo sus instrucciones, un nuevo texto. La convención toma las decisiones y decide qué va en el texto. La redacción, propiamente tal, es responsabilidad de los juristas. La convención aprueba el texto de los profesionales y lo somete a un nuevo plebiscito.
-¿Cuán responsables son los convencionales que hicieron gala de cierta soberbia como Jaime Bassa?
-La arrogancia, combinada con el show mediático dispuso a mucha gente en contra de la convención. Un viejo teorema en política dice que “el estilo es importante”. Cuando se actúa con impertinencia se pierden apoyos en forma acelerada, y eso sucedió con la convención. Cuando se escriba la historia detallada de estos años, la lista de responsables del gran fracaso del progresismo maximalista será encabezada por Bassa. Pero, desde luego, no será el único en esa lista.
-De alguna manera, ¿este resultado pone fin a un ciclo político desde el estallido social?
-Es tentador pensar que es así, pero me temo que no lo es. Ese fin, que tantos anhelan, se producirá cuando el gobierno tome una actitud firme, definitiva y sin claudicaciones con respecto a la violencia. La violencia es la hija putativa del estallido, y hay que leer el 62% como un rechazo profundo a la intimidación, a los actos violentistas, a los overoles blancos, a las quemas de buses, maquinarias y casas.
-¿Cuán urgente es el cambio de gabinete? ¿Se acabó el gabinete de los “cercanos” como Jackson y Siches?
-Muy urgente. El Presidente Boric debe sumar adultos a su gabinete, gente con experiencia y con perspectiva histórica, gente que entienda de Política con “P” mayúscula. Izkia Siches debe salir; Giorgio Jackson también, pero no creo que salga. Más bien me parece que lo van a reacomodar en otro puesto del gabinete. Hablando de adultos, me da la impresión que el discurso de la noche del 4 de septiembre lo escribió un adulto, y eso es bueno.
-¿Qué efecto tiene en la economía este resultado?
-El resultado reduce la incertidumbre, y eso va a tener un efecto positivo sobre la economía. Pero es muy importante distinguir entre una reducción y una eliminación de la incertidumbre. El proceso continúa; faltan los detalles, y mientras estos no se aclaren algún nivel de incertidumbre va a continuar. La magnitud de ese efecto sobre la economía va a depender de otros factores de política contingente, incluyendo la naturaleza del cambio de gabinete y los nuevos nombramientos. Al final, el presidente tiene una gran oportunidad de liderar el proceso y de unir al país en pos de un objetivo nacional y común.
-¿Falta una autocrítica severa en los liderazgos del Apruebo?
-Es muy impresionante que los activistas de la izquierda dura — incluyendo ex convencionales abogados constitucionalistas — no quieran reconocer ningún error, y estén culpando a las fake news y a una máquina propagandística de la derecha, máquina que o no existe o que, como siempre, ha sido muy ineficiente. Esta actitud de meter la cabeza en un agujero, como la avestruz, no ayuda en nada a avanzar en resolver los problemas del país.