El ex presidente de RN, Mario Desbordes, apuesta a que su sector está alineado por una nueva constitución, una vez que gane el Rechazo. Plantea un plebisicito para determinar el mejor mecanismo para escribir el texto.
"La izquierda va a sacar el cuco otra vez de la derecha: mejor apruebe porque la derecha no va a querer hacer cambios. Esa táctica no está teniendo el efecto que la izquierda pretende", dice.
-¿Cómo queda el escenario del Rechazo, luego de las declaraciones del Presidente Boric?
-Boric está reconociendo algo que es evidente, que cada vez es más la cantidad de gente que está por el Rechazo. Pero, aparte de eso, no estoy de acuerdo con lo que plantea el Presidente. Yo creo que está diciendo medias verdades. Efectivamente la mayoría de la gente, casi el 79%, votamos apruebo y por una convención de constituyentes 100% electos.
-¿Dices que el Presidente no asume toda la verdad?
-Lo que él omite, y ahí está la parte que no es cierta, es que a la fecha del plebiscito de entrada no estaba definido el mecanismo de los cupos de pueblos originarios, tampoco estaba definida la fórmula que se iba a usar para elegir a los independientes. En estricto rigor, ambos puntos no se plebiscitaron. La ciudadanía no los conocía.
Pretender volver a hacer una elección en los mismos términos que la anterior, sustentando que ya fue aprobado en un plebiscito, eso no es cierto. El presidente Boric está cometiendo un tremendo error.
-¿Por qué? También es una forma de desligarse de un resultado que puede ser adverso.
-Él debería liderar hoy día un gran acuerdo nacional, que abarque dos cosas. Primero, que si gana el Apruebo de todos modos es necesario reformar. Y segundo, que plantee el camino para que, en el caso de que gane el Rechazo, lleguemos a una nueva constitución lo más rápido posible.
En la centro izquierda hay muchos que hablan de aprobar para reformar, pero resulta que no dicen absolutamente nada de qué es lo que reformarían. Y además tenemos una oposición a reformar de parte del PC, que está feliz con la nueva Constitución, porque pusieron todo lo que querían en el texto, junto a una parte del FA.
Ese aprobar para reformar que plantea el PPD, y parte del PS, no es más que una frase sin ningún contenido.
-¿Cuál es tu preferencia sobre cómo llegar a una nueva constitución si gana el Rechazo?
-Deberíamos poner sobre la mesa un par de alternativas y votarlas en un plebiscito. Una podría ser agregar 10 o 15 puntos del texto de la Convención, sobre los cuales hay consenso de que son un aporte, a la propuesta constitucional que hizo la Presidenta Bachelet en 2018.
Segunda alternativa: que se haga una nueva Convención, pero no en los mismos términos de la anterior. El Presidente Boric comete un error, en vez de liderar pretende imponer una fórmula y eso lo pone en una posición más de diputado que de Presidente de la República.
Habló el Gabriel Boric diputado, no el Presidente de la República. No le habló a todos los chilenos, sino a su grupo, a su lote. Y además intentando imponer una fórmula que le acomoda al Frente Amplio y al PC. Esa fórmula no tiene ningún piso.
-De todas formas, ¿es una opción realista la del Presidente de ponerse en el escenario del Rechazo?
-Hoy día todos están reconociendo que los más probable es que gane el Rechazo, por esto el Presidente se abre a esta posibilidad. Acuérdate cuando se abrió al plan B y recibió una capotera de todo su sector. Hoy es evidente que habían cometido un error el Presidente y el ministro Jackson al vincular el resultado con la suerte de su Gobierno, eso sí que era una barbaridad, pero echaron pie atrás. Ahora el Presidente da un paso más adelante y dice: “si gana el Rechazo, esta es la fórmula”. Se equivoca. La fórmula tiene que decidirla la ciudadanía, no el Gobierno. Tiene que liderar un gran acuerdo amplio, pero no imponer un mecanismo.
-La derecha se ha negado muchas veces a los cambios constitucionales. ¿Por qué ahora sí?
-La derecha ya dijo que está por una nueva constitución, ya comprometió puntos mínimos surgidos del texto de la Convención, y el detalle tiene que discutirse en el proceso posterior al plebiscito. La izquierda no ha hecho absolutamente nada. No tenemos idea de qué se trata el aprobar para reformar. Efectivamente, la centro derecha se opuso a algunos cambios, pero también es cierto que gracias a los votos de la centro derecha, se logró la reforma de 2005. Destaco el liderazgo de Sergio Romero. Se eliminaron todos los aspectos que hacían que la Constitución no pasara los tests democráticos internacionales.
Ahora bien, es obvio que en esta ocasión la izquierda va a sacar el cuco de de la derecha: mejor apruebe porque la derecha no va a querer hacer cambios. Esa táctica no está teniendo el efecto que la izquierda pretende. La ciudadanía en la medida que conoce o lee el texto se está volcando al Rechazo. Es un poco estéril decir si se le puede creer a la derecha o no. La derecha ya puso su palabra sobre la mesa. Si no lo cree a la derecha es problema suyo, va a ganar el Rechazo. Por eso digo que hagamos un acuerdo ahora.
Valoro lo que dice Carolina Tohá: la reforma de los 4/7 puede ser funcional al Rechazo, pero es un seguro adecuado. Esa es la disposición que tienen que tener las coaliciones de gobierno, y no lo que está impulsando el PC y el FA, que es bloquear todo.
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-La campaña del Rechazo no tiene rostros de derecha, es casi anónima, salvo lo que hacen los Amarillos. ¿Es una decisión consciente?
-La mejor campaña del Rechazo es el texto de la constitución. Ahí está el corazón de la campaña del Rechazo. No se necesita más, no se necesitan rostros, ni artistas de telenovela, ni cantantes. Basta y sobra con el texto consttucional porpuesto por la Convención.
Ahora, los han dado un pie atrás, porque las directivas actuales estuvieron todas por el Rechazo, entonces no es conveniente que gente que estuvo antes contra el proceso constituyente hoy día lidere este campaña. Porque lo que tiene más sentido para la gente es conocer el texto y la voz de quienes estuvimos por el Apruebo. Por eso, creo que el esfuerzo que está haciendo Amarillos es positivo. Por eso es muy importante la carta del presidente Frei, por eso es tan relevante que la senadora Rincón, el senador Walker, salgan a decir que rechazan, gente que estuvo por al Apruebo.
No rechazamos el proceso, sino el texto. No hay que cometer errores, como la torpeza que se cometió contratando a actores de comercial de multitienda, cuando hay miles de personas de a pie felices de dar su testimonio.
-¿Por qué la derecha no logró poner su marca en casi nada de la Convención teniendo 37 constituyentes?
-Primero, porque la izquierda radical vetó cualquier cosa que viniera de la centro derecha y de la derecha. Y en segundo lugar, muchos constituyentes de derecha más dura empezaron desde el día uno a buscar el fracaso del proceso. Eso es evidente. Y provocó que se dividiera la centro derecha al final, en dos o tres comités. La extrema derecha, una parte de la UDI y los Republicanos, lo que terminaron forzando fue a que se dividiera la centro derecha en tres comités distintos. Ni siquiera hubo unidad de los 37, había tres grupos distintos, con no mucha coordinación, y además todos con la sospecha que provocaban estos constituyentes duros en extremo que no querían el proceso.