Consecuencias del "millennialazo" de Jackson: Su rol clave en el plebiscito queda en tela de juicio

Qué observar. Ninguna emoción positiva había ayer en los partidos del socialismo democrático luego de las duras críticas del ministro secretario general de la Presidencia, Giorgio Jackson, en una entrevista en la plataforma Twitch. La disputa generacional entre los que gobernaron entre 1990 y 2021 versus los “millennials” que están hoy en La Moneda fracturaron a todo el bloque.

• Los partidos, salvo el PPD, optaron por el silencio oficial, pero se comenzó a instalar una tesis: Jackson ya se gastó toda la línea de crédito, como articulador de proyectos de ley y, peor aún, como canalizador de las propuestas que los partidos están por cerrar en torno a la propuesta constitucional.
• La primera en lanzar esta tesis fue la presidenta del PPD. Natalia Piergentili, en una entrevista en radio Infinita señaló: “Mientras cada uno de los partidos tenía una propuesta de mejora en el ámbito más técnico, de técnica legislativa, la Segpres era un espacio razonable. Pero hoy día cuando esto ha escalado a una propuesta de acuerdo político, la verdad es que Segpres no puede ser un interlocutor y no lo es”, dijo.
• La directiva del PS optó por mantener silencio y dejar que los parlamentarios atacaran a Jackson. Y lo hicieron. El senador Alfonso De Urresti planteó en CNN que Jackson instala la “tesis del reemplazo” de las generaciones previas. “Son palabras de un ego, de una soberbia brutal”, dijo.
• De acuerdo al senador, su rol de enlace entre el Gobierno y el Congreso quedó invalidado, y ello se arrastra desde antes.
• En este partido señalan fuentes internas, los dichos de Jackson solo vienen a complejizar una relación con los parlamentarios que ya estaba debilitada. Y que sus declaraciones contribuyeron a su ya alicaída posición política con ellos, pues se hundió aún más.
• Asimismo, el PS no tenía contemplado entregar una propuesta de reformas a Jackson, pues había acordado, previamente a conocer los dichos del ministro de la Segpres, presentar un documento público en el que señalarán cuáles son los puntos en los que estarán disponibles o no.
• En cambio, si hubiesen acordado proponer normas, sí las habrían entregado a Jackson. Pero tomaron otra decisión un día antes de que se conocieran las palabras del ministro.
• En el PL y el PR optaron por el silencio, aunque sí se reconoció la molestia profunda con Jackson.
• Sin embargo, el socialismo democrático mantendrá el itinerario y espera arribar este jueves a un acuerdo marco de “mínimos comunes” que sería tratado con los presidentes de los partidos de Apruebo Dignidad.

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El rol de “canalizador”. El lunes, durante el comité político ampliado del gobierno con los presidentes de los partidos del oficialismo, se les informó a los presidentes que Jackson asumiría un rol clave en la recta final de la campaña de salvataje del Apruebo: Recibir las propuestas de los partidos, canalizarlas en un documento, “armonizarlas” y con ello marcar una hoja de ruta para el día post plebiscito.

• “En principio serán los aportes de oficialismo que se van a canalizar a través de la Segpres. Nace desde el gobierno. El propio ministro Jackson nos planteó que va a ser a través de su ministerio la canalización de las propuestas que tengan los diversos sectores para mejorar el texto”, afirmó tras la reunión del lunes la propia presidenta del PPD, Natalia Piergentili.
• Sin embargo, la crisis que abrió Jackson prácticamente deja por ahora en punto muerto esta opción.
• Incluso atravesando a fuerzas que están fuera del gobierno, como la DC, partido que oficialmente optó por el Apruebo, pese al desmarque de militantes emblemáticos.
• La senadora Yasna Provoste dijo que para arribar “a una estrategia de mínimos comunes uno tiene que tener una disposición genuina de querer colaborar y de concederle al otro la posibilidad de que pueda aportar. Y la verdad, con las declaraciones que hemos visto, de supuesta supremacías morales respecto de otros, es difícil que una agenda de mínimos comunes sea realmente posible de llevarse adelante”.

¿Cambio de gabinete? El traspié de Jackson reavivó las brasas de uno de los temas que, en medio de la campaña para el plebiscito, se había mantenido casi apagado: Un ajuste ministerial.

• Los partidos del socialismo democrático hace tiempo han puesto sus ojos en dos ministros que, a su juicio, no dieron el ancho: Jackson e Izkia Siches.
• El primero por la conflictiva relación con los parlamentarios, el desorden para ordenar a Apruebo Dignidad en proyectos clave y el episodio de este miércoles, considerado por muchos como “la gota que rebalsó el vaso”.
• En el caso de Siches, se cuestionan los resultados en materia de seguridad, tema que ha acorralado al Gobierno en una espiral que no le ha permitido retomar su agenda y que ha horadado el apoyo a Boric, el que se ha asociado directamente con el rendimiento del Apruebo.
• Hoy, en plena crisis por el episodio de Jackson remitió un mensaje por WhatsApp a los presidentes de partidos del oficialismo: “Estimados presidente de partidos. Estamos en el ojo del huracán. Buscarán cualquier cosa para hacernos pelear, distorsionar o dañar. Muy atentos a los errores no forzados y a no caer en su juego. Este es un gobierno diverso en edades, experiencias y miradas. #Seguimos”.
• Para el socialismo democrático, en todo caso, ocupar uno de dichos puestos es clave dado que no tienen una representación en el equipo político de La Moneda. Y por ello evitaron caer en el ataque directo a Jackson desde los partidos para mantener la señal de “lealtad” hacia Boric. Pero entienden que la situación tocó fondo.
• Por ahora saben que presionar un cambio de gabinete debilitará aun más la defensa de la propuesta de la convención de cara al plebiscito. Pero también tienen claro que el gabinete actual tiene fecha de vencimiento: El 5 de septiembre.

Los dichos de Jackson. El secretario de Estado dio una entrevista a través de la plataforma Twitch donde hizo duros cuestionamientos a las generaciones y gobiernos precedentes. Entre ellos sus socios del socialismo democrático, que gobernaron 24 años entre 1990 y 2022.

• “Nuestra escala de valores y principios en torno a la política no solo dista del gobierno anterior, sino que creo que frente a una generación que nos antecedió, que podía estar identificada con el mismo rango de espectro político, como la centro izquierda y la izquierda, yo creo que estamos abordando los temas con menos eufemismo y con más franqueza”, dijo.
• “Tenemos infinitamente menos conflictos de interés que otros que trenzaban entre la política y el dinero. Son tantos años de administrar el poder que es muy fácil tener el mismo tiempo el poder político y un compromiso con un negocio que pueda estar por fuera”, agregó.
• Jackson criticó los conflictos de interés y cómo estos pueden derivar en corrupción o tráfico de influencias: “Yo diría que si llegamos a ver algo parecido en nuestra administración, esos se van a ir cagando”.

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