El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, dijo tener confianza en conseguir los votos necesarios para aprobar el nuevo proyecto de reajuste al sector público ingresado esta tarde al Congreso y que mantiene el guarismo en 3,2% pese a la negativa de un sector de la Nueva Mayoría.
“Nosotros no votamos, lo que podemos tener es una confianza alta, de que todas las conversaciones que hemos hecho han fructificado y esto va a ser aprobado”, afirmó el secretario de Estado.
Consultado respecto de cómo obtendrían los votos para la aprobación del articulado, el jefe de la billetera fiscal dijo tener confianza en conseguir “una gran cantidad de votos de la Nueva Mayoría” y añadió que “si tenemos votos de la oposición bienvenidos sean”.
“El reajuste es de todos. Esto no se trata de una guerra gobierno-oposición. Se trata de dar gobernabilidad y tomar decisiones que a veces son difíciles”, añadió Valdés.
El ministro reveló que la propuesta la mantención del reajuste en 3,2% y considera un congelamiento para los sueldos líquidos sobre $4,4 millones.
Del mismo modo, supone la entrega de un bono de termino de conflicto de $114 mil para rentas liquidas hasta $550 mil al mes de noviembre. Asimismo, la de un bono de $35 mil para todos los trabajadores que obtienen entre $550 mil y $2,3 millones mensuales. En total, serían casi 1 millón de trabajadores los beneficiados con estos bonos.
Por último, el jefe de la billetera fiscal afirmó que este nuevo esquema implica la inyección de $4.992 millones adicionales al que se presentó en el rechazado veto presidencial. “Este proyecto de ley significa un aumento financiero muy importante”, manifestó.
