Un crecimiento en torno a 2% registrarán este año los sectores de Comercio y Restaurantes y hoteles, los que se han visto afectados por la desaceleración de la economía, y el menor dinamismo de la masa salarial y del ingreso nacional bruto disponible real.
Así lo arrojó el quinto informe sectorial elaborado por el área de Estudios y Políticas Públicas de Banco Santander, que prevé una expansión por debajo del PIB y tiempos difíciles para ambos sectores, mientras las condiciones de empleo y salario de la economía no muestren un verdadero resurgir.
Entre 2010 y 2013, tanto Comercio como Restaurantes y hoteles fueron sectores muy dinámicos, registrando un crecimiento por sobre el PIB: 10,8% y 5,7%, respectivamente. Con lo que contribuyeron con 0,93 puntos anuales de crecimiento.
"Durante los primeros años de esta década tuvieron un muy importante dinamismo, pero desde diciembre de 2013 ambos se han ralentizado y se han perdido muchos puestos de trabajo", explicó el banco.
La tasa de cesantía en el comercio (5,7%) es muy similar a la tasa de cesantía total nacional, pero en restaurantes y hoteles ésta se eleva hasta un 8,7%.
Sin embargo, a pesar de que se han destruido 38 mil empleos en el comercio en poco más de un año, esta reducción ha sido menor que la ralentización de las ventas. Con todo, es el sector donde se han perdido más puestos de trabajo, frente a una leve creación de empleo en restaurantes y hoteles.
En cuanto a las expectativas, Santander sostuvo que como en la mayoría de los sectores de la economía, las expectativas juegan un rol muy importante. En esa línea destacó que tanto el indicador de confianza de los consumidores (IPEC) como el indicador de confianza de los empresarios (IMCE: total y comercio) están en zona pesimista y aunque ambos tuvieron un incipiente repunte en marzo, han vuelto a descender. Por lo tanto, "los brotes de confianza se marchitan".
"Situando la mirada en la medición de expectativas de los empresarios del comercio, vemos que el resultado global es negativo, pero que la situación general del negocio siempre se ha mantenido en terreno positivo, al igual que las expectativas sobre la evolución de los costos. En tanto, las expectativas de inflación, situación económica del país y empleo restan al índice", precisó el informe.