La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) proyectó que la economía chilena caerá un 0,1 por ciento durante este año mientras que el 2024 aumentará un 1,9 por ciento. Además, advirtieron lo riesgoso que implicaría rechazar una nueva Constitución.
“La retirada de las medidas de apoyo relacionadas con la pandemia y las estrictas condiciones monetarias frenarán el consumo y la inversión durante el 2023, pero dichos efectos deberían disminuir a principios de 2024”, señaló el organismo.
Además indicaron que la “demanda externa más sólida, en particular de China, debería sostener el crecimiento de las exportaciones. Los riesgos están inclinados a la baja. La guerra de Rusia contra Ucrania podría conducir a mayores presiones sobre los precios de la energía, retrasando la flexibilización de las políticas”.
Con respecto a las reformas, indican que “las mejoras en los programas sociales y la infraestructura requerirían recaudar más ingresos, desde sus bajos niveles en comparación con los países de la OCDE, a través de un sistema tributario más progresivo”.
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En ese sentido, agregan que “la productividad se impulsaría mediante el fortalecimiento de la competencia mediante la reducción de las barreras al espíritu empresarial y la financiación adecuada de la autoridad de competencia, y una mayor inversión en iniciativas eficientes de investigación y desarrollo”, agregan.
Sobre el proceso de nueva Constitución, aseveran que “la falta de aprobación de una nueva Constitución y la falta de claridad sobre el futuro de la reforma fiscal podrían aumentar la incertidumbre política, perjudicando la confianza de las empresas y los consumidores y provocando un consumo y una inversión lentos”.
