Ad portas de cumplirse dos meses desde que comenzó el proceso para rescatar una parte de los ahorros previsionales, ayer el Congreso comenzó a discutir nuevamente una iniciativa similar, que busca un segundo rescate.
Por cerca de tres horas, la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados presentó y discutió cinco mociones que persiguen que los afiliados puedan acceder a sus ahorros de forma anticipada.
Esta vez también se les daría esta posibilidad a los pensionados por renta vitalicia y a los enfermos terminales.
A la instancia, fue invitada la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, quien recalcó que las propuestas no apuntan a fortalecer el sistema de seguridad social y van en desmedro de las pensiones.
Uno de los argumentos en contra que señaló la ministra fue que el impacto será limitado. Según Zaldívar, más de nueve millones de personas ya han retirado fondos, donde el 20% ya rescató lo que tenía “y cerca de un 65% que retiró si no todos sus recursos, bastante más que el 10% de sus fondos. Esto hace que tengamos una norma que no necesariamente, va a cumplir con su objetivo”, criticó.
Respecto a las propuestas que buscan que los jubilados por renta vitalicia accedan a sus ahorros, la secretaria de Estado explicó que cuando un trabajador opta por esta modalidad, transfiere la propiedad total de sus fondos a una compañía de seguros, a cambio de recibir una pensión fija. “No habría de donde ejercer esta posibilidad de un retiro del 10% porque no existe un fondo individual de cada persona”, sostuvo.
A su vez, advirtió que esta medida desestructura la mutualización de los riesgos. “En la renta vitalicia, los recursos de cada uno de los pensionados, de alguna manera se mutualizan y los riesgos de longevidad se van compartiendo entre la totalidad de los jubilados. Por lo tanto, es imposible poder hacer esta división respecto de cada uno de los fondos”, aclaró.
Por último, sobre la iniciativa que busca que quienes padecen una enfermedad terminal también puedan rescatar sus ahorros, Zaldívar declaró que el proyecto carece de importantes definiciones.
A su juicio, no se establecen elementos esenciales para calificar qué se entenderá por enfermedad terminal y falta referencia a las normas de calificación. Tampoco se establece la calificación del enfermo terminal dentro del sistema de pensiones y no se precisa si será calificado como afiliado activo o pensionado.
De todas formas, aseguró que desde el ministerio quieren avanzar en esta materia. “Pensionados y trabajadores que se enfrentan a una realidad de ser diagnosticados con una enfermedad terminal, no pueden ser tratados de la misma manera y la tabla de expectativa de vida no corresponde”, puntualizó.
Oposición asegura que están los votos
Tras la intervención de la titular de Trabajo, la diputada del Partido Humanista, Pamela Jiles, afirmó que la propuesta tiene piso político, ya que 14 parlamentarios del oficialismo le prometieron que darían su visto bueno al proyecto.
Además, criticó el actuar de la actual administración. “Como el Gobierno no ha implementado las políticas públicas destinadas a su deber constitucional de garantizar la vida y la seguridad de los ciudadanos, es entonces que los diputados tenemos la obligación legal de hacerlo”, manifestó.
Por último, la diputada argumentó que en esta oportunidad el Ejecutivo no podrá decir “que se va a incendiar Chile, ni que es un proyecto regresivo, ni que se va a destrozar la economía como lo sostuvo en la discusión del primer retiro”.