“Estoy muy honrado. Para mí ha sido un privilegio y un honor presidir este Banco Central (BC) durante los últimos cinco años”. Con esta frase, Rodrigo Vergara inició su última intervención ante la prensa apostada en el frontis del edificio de Agustinas 1180, lugar donde minutos antes recibió un cerrado aplauso de los funcionarios de la institución, acompañado de quien será su sucesor a partir del próximo domingo, Mario Marcel.
El economista, que a partir de la próxima semana será parte del equipo de investigación del Centro de Estudios Públicos (CEP), debió enfrentar en su gestión el periodo más extenso de inflación por sobre el rango meta del ente emisor (2%-4%) en los últimos diez años.
De hecho, entre abril de 2014 y julio de 2016 la inflación completó 28 meses sin bajar del 4% anual (con la excepción de noviembre del 2015) y con un peak de 5,7% en octubre de 2014.
A eso se sumó un extenso periodo de desaceleración económica que este 2016 completará tres años de crecimiento en torno al 2%.
“No fue un periodo fácil” reconoció Vergara antes de defender su gestión. “Nosotros hicimos la política monetaria que creíamos era la adecuada a pesar que la inflación estaba más alta. Hicimos una política monetaria más expansiva porque sabíamos que estos eran efectos transitorios producto del aumento del tipo de cambio y creo que el tiempo nos dio la razón”, manifestó.
De hecho, tras conocerse la inflación de 0,1% en noviembre, el costo de la vida acumula un incremento a doce meses de 2,9%, justo por debajo del centro de la meta. “Ciertamente me hace sentir muy orgulloso el lograr las metas que nos hemos impuesto y que el país nos ha impuesto”, destacó
Consultado por las débiles cifras de actividad en los últimos meses, de hecho, el Imacec de octubre anotó un retroceso de 0,4%, Vergara reconoció que no es una situación “satisfactoria”.
“El propio gobierno lo ha dicho. Llevamos tres años creciendo al 2% y las proyecciones del próximo año no es mucho más que eso. Creo que como país debiéramos estar preocupados y hacer todos los esfuerzos que sean necesarios para que el país retome tasas de crecimiento más elevadas”, afirmó uno de los nombres que suenan para integrarse a los equipos programáticos del “candidato” Sebastián Piñera.
Sin embargo, por ahora, las preocupaciones del economista están en otro lado. “Me voy a tomar unas buenas vacaciones con la familia”, dijo justo antes de despedirse, tomar de la mano a su esposa Loreto Lira, y caminar por Agustinas hacia la Plaza de la Constitución donde lo esperaba el resto de su clan. Así concluyó el paso de Rodrigo Vergara por el Banco Central.