La denuncia por desaparición del economista Rafael Garay ingresada ayer a la Fiscalía Centro Norte, encendió las alarmas de muchos de sus clientes a través de la empresa Think & Co, con la que prestaba asesorías de inversión.
Si bien, Garay reconoció hace unas semanas que el cáncer que lo aquejaba lo obligaba a poner término anticipado de muchos de los contratos que manejaba, trascendió que varios de sus clientes aún tienen fondos que no han sido reintegrados, por lo que ya se estarían agrupando para presentar una querella.
En el entorno legal de varios de ellos, se comenta que hay varias figuras de la televisión que habrían invertido en operaciones con Think & Co, y que formarían parte de quienes se están comenzando a organizar.
Su preocupación creció rápidamente a medida que fueron surgiendo nuevos antecedentes sobre Garay. En particular que está involucrado en otras querellas por estafa que se siguen en Concepción, contra algunas de las sociedades donde aparece vinculado.
Más todavía, cuando crecen las dudas sobre la veracidad de su enfermedad. Hay que recordar que Garay comentó a su círculo cercano que el viaje que iniciaba el 4 de septiembre pasado tenía como finalidad someterse a un tratamiento en Francia, país que sólo utilizó como escala el 5 de septiembre, pues de inmediato se dirigió a Tailandia, donde permaneció hasta el 11 de septiembre y luego retornó a Holanda y Rumania, donde ayer miércoles realizó un trámite en el consulado de Bucarest.