La Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) un requerimiento en contra de tres laboratorios —Biosano, Sanderson y Fresenius Kabi Chile— que se coludieron en procesos de licitación pública de la Central Nacional de Abastecimiento (Cenabast).
El escrito sostiene que las compañías acordaron un cartel en el cuál una de ellas ofertaría el menor precio en licitaciones para adquirir medicamentos inyectables genéricos, con lo que buscaban determinar quién proveería estos medicamentos.
La fiscalía identificó 93 productos involucrados en el acuerdo, los que contienen diversos principios activos y se utilizan para tratar una amplia gama de patologías. Entre el año 1999 y el primer semestre del año 2013 Cenabast requirió este conjunto de medicamentos en 1.262 ocasiones, describe el escrito firmado por el fiscal Felipe Irarrázaval.
Modus operandi
Los contactos se daban entre altos ejecutivos de cada laboratorio y también habría participado el Laboratorio Rider hasta el año 2003, cuando abandonó el mercado de las ampollas.
“En sus inicios, el cartel se reunía en un restaurante cercano al Parque O’Higgins. Alrededor del año 2001 las reuniones pasaron a realizarse en el Centro Vasco, en la comuna de Santiago. Posteriormente, en torno al año 2009, comenzaron a reunirse en el domicilio particular de uno de los ejecutivos. Esporádicamente, además, los miembros del cartel se daban cita en diversos cafés de la capital”, detalla el informe.
El acuerdo imputado involucró medicamentos genéricos que se inyectan en forma líquida al organismo a través de la piel (vía intravenosa), entre ellos analgésicos, anticoagulantes, antinflamatorios, antiespasmódicos, relajantes musculares, antibióticos, vitaminas y tranquilizantes.
La Fiscalía pide una multa de 18.000 Unidades Tributarias Anuales (UTA) equivalente a unos US$ 15,1 millones para Sanderson y otras 2.000 UTA (US$ 1,7 millones) para Fresenius Kabi Chile. En tanto, Biosano se habría acogido al beneficio de exención de multa cooperando en la investigación.
Beneficios económicos
La FNE dice entre sus argumentos que el acuerdo entre los laboratorios dificultaba o desincentivaba la entrada de nuevos competidores al mercado. Sostiene que la participación de mercados que agrupaban entre ellas osciló entre 65,2% y 96.5% en el periodo investigado.
La entidad sostiene que “al identificar potenciales entrantes, las requeridas podían hacerles frente en forma conjunta. En efecto, al menos en una ocasión desplegaron una estrategia para excluir a un competidor, con precios agresivos y denuncias reiteradas ante la autoridad sanitaria”.
Al calcular el beneficio económico obtenido por las firmas coludidas, la FNE señala que se manifiesta en que obtuvieron ingresos sobrenormales al concentrar 85% del mercado durante el periodo imputado.
La fiscalía no determina el daño económico sobre los usuarios de Cenabast y centra el requerimiento en que el acto ejecutado por los laboratorios entorpeció la libre competencia, por esa razón sugiere al TDLC que los multe.
