Por AFP
La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos dio otro paso el miércoles hacia un comienzo de normalización de su política monetaria, abandonando su compromiso de mostrarse "paciente" antes de elevar su tasa directriz.
Al término de su reunión de dos días en Washington, el Comité monetario de la Fed (FOMC) confirmó nuevamente el mantenimiento de sus tasas cerca de cero, nivel en el que se encuentran desde 2008, a fin de seguir sosteniendo la reactivación de la economía.
El banco central innovó, sin embargo, en la semántica a fin de enviar una señal a los mercados que esperaban la decisión. En el comunicado final no hace referencia a la "paciencia" que había invocado en las últimas dos reuniones para justificar un statu quo monetario.
"En conformidad con nuestro comunicado anterior, el Comité estima que un alza de las tasas de fondos federales sigue siendo improbable durante la reunión del Comité monetario de abril", previsto para el 28 y 29 del mes próximo, indica el comunicado.
"Ese cambio en el mensaje de orientación no significa que el Comité haya decidido una fecha para una primera alza de tasas", agrega.
Concepto que luego reafirmó la presidenta de la Fed Janet Yellen en conferencia de prensa, reiterando que "la modificación de nuestro mensaje de orientación no debe ser interpretado como que hemos decidido el calendario de alza" de tasas, agregando que la Fed no se mostrará "impaciente".
En su comunicado, adoptado por unanimidad, la Fed indicaba que no sería "apropiado" elevar las tasas hasta que se constate "nuevas mejorías" en el frente del empleo y cuando tenga "razonable confianza" en el hecho de que la inflación se incremente hacia su objetivo de 2% anual.
Inflación en baja
En apoyo del mantenimiento del statu quo el Fed destaca algunos puntos débiles de la economía estadounidense. Si bien nota que las condiciones del mercado laboral continúan mejorando, el banco central subraya que el crecimiento económico del país se "moderó un poco".
En el cuarto trimestre 2014, el incremento del Producto interno bruto estadounidense se desaceleró, situándose en 2,2% en términos anualizados. Recientes indicadores, principalmente en el sector inmobiliario parecen sugerir que el invierno riguroso nuevamente afectó la actividad económica en gran parte del país.
En su comunicado, el FOMC subraya igualmente que la inflación "siguió declinando", presionada por la caída de los precios mundiales del petróleo, alejándose más del objetivo a largo plazo de la Fed. En enero, los precios al consumo en Estados Unidos aumentaron solamente 0,2% en relación a enero de 2014.
Además, la Fed redujo netamente sus previsiones de crecimiento e inflación para 2015 y 2016, al tiempo que se declaró optimista sobre la tasa de desempleo.
El Producto interno bruto (PIB) del país aumentaría solamente de 2,3% a 2,7% en términos anualizados en el último trimestre 2015, marcando una degradación en relación a la banda de 2,6% a 3,0% prevista en diciembre, según las nuevas proyecciones trimestrales del Comité de política monetaria (FOMC).
