La Reserva Federal (Fed) estadounidense dejó este miércoles sus tasas básicas sin cambios señalando que el crecimiento se desaceleró en Estados Unidos, según el comunicado del Comité Monetario de la entidad (FOMC).
Las tasas básicas de interés se mantienen entre 0,25% y 0,50%, como lo están desde diciembre cuando fueron subidas por primera vez en 8 años.
En el comunicado emitido tras dos días de discusiones, el FOMC dijo que si bien el crecimiento estadounidense se desaceleró, el mercado laboral mantiene su dinamismo.
La Fed continúa "siguiendo de cerca" la evolución económica y financiera internacional, señala el comunicado que, en cambio, no alude explícitamente a los riesgos que enfrenta la primera economía mundial.
Al igual que en la reunión celebrada en marzo, solo una integrante del FOMC, Esther George, votó en contra del statu quo en materia de política monetaria.
La Fed no dio indicaciones sobre cuál será su actitud ante las tasas de interés en la reunión que sostendrá en junio el comité.
A lo sumo, los miembros del FOMC dijeron que en el futuro "la actividad económica crecerá moderadamente" y que los indicadores del mercado de trabajo "seguirán ganando fuerza".
Estimaron que la inflación seguirá siendo baja a corto plazo pero mostraron confianza en que subirá hacia el objetivo de 2% a mediano plazo, cuando se hayan disipado "los efectos provisorios" de los bajos precios de la energía y de productos importados.
"El comité sigue vigilando de cerca los indicadores de la inflación y los acontecimientos económicos y financieros mundiales", añade el comunicado.
En lo que se refiere a la situación interna de la economía estadounidense, la Fed vislumbra una actividad relativamente equilibrada, con puntos fuertes pero también con puntos débiles.
Si bien los gastos de los hogares estadounidenses son magros, la Fed dijo que "los ingresos reales de los hogares aumentaron a un ritmo sólido". El mercado inmobiliario mejoró pero las exportaciones siguen siendo magras, según las observaciones de la Fed en su comunicado.