El Informe de Estadísticas Monetarias y Financieras correspondiente a marzo que publicó el Banco Central trajo datos que dejaron el vaso medio lleno para los consumidores chilenos.
Para quienes buscaron un crédito hipotecario durante el tercer mes del año, la tasa de interés promedio anual y reajustable en UF se ubicó en 4,31%, subiendo levemente dos puntos base respecto a febrero.
En el reporte, la autoridad resaltó que la tasa para los préstamos hipotecarios se mantuvo en niveles similares a los meses previos.
La Asociación de Bancos (ABIF) señaló la semana pasada tras conocerse las cifras de la industria al término de febrero que si bien la tasa se ha mantenido en niveles estables desde el inicio del año, “aún está muy por encima de los niveles registrados antes de la pandemia”.
Bajo este contexto, el gremio afirmó que “ante un panorama macroeconómico complejo, caracterizado por una desaceleración de la actividad, una aún alta inflación y remuneraciones reales a la baja, es probable que en los próximos meses la demanda por crédito hipotecario se mantendrá acotada, mientras no haya un cambio sustancial en sus fundamentos”.
Muestra de ello es que el flujo de crédito hipotecario continuó registrando una contracción anual durante el segundo mes del año. En efecto, el monto otorgado en el trimestre móvil de diciembre a febrero fue un 14% inferior en comparación con 12 meses atrás.
A la baja consumo y comerciales
En la otra cara de la moneda, los créditos de consumo tuvieron un respiro: la tasa de interés anual retrocedió 171 puntos base en comparación a febrero y se ubicó en 27,66% anual.
La autoridad monetaria explicó que esta baja se debió por menores tasas en todos los componentes, ya sean para sobregiro, créditos en cuota y para tarjetas de crédito.
Esta es la primera caída mensual registrada por el Banco Central desde octubre del año pasado. A pesar de ello, la tasa todavía se encuentra en niveles similares a los observados en mayo de 2014.
Las subidas que han habido en las tasas de interés para los préstamos de consumo que se han observado en los últimos meses se ha debido al incremento de la tasa de política monetaria (TPM) del Banco Central que busca atajar las presiones inflacionarias de la economía.
Los préstamos comerciales también experimentaron un descenso, el primero después de cuatro meses al alza. La tasa de interés anual se posicionó en 16,28% durante marzo, anotando una baja de 33 puntos base respecto a febrero.
La ABIF recordó la semana pasada que “las tasas de interés de nuevos créditos comerciales se comportan en línea con la dinámica de la TPM, que constituye un piso para el costo de financiamiento de la banca”.