La guerra comercial entre Estados Unidos y China, la desaceleración de esta última por las restricciones al crédito, las crisis en Argentina y Turquía y la normalización monetaria en el mundo desarrollado han dado pie a un creciente pesimismo sobre el estado de la economía global en 2019.
Eso es lo que recoge el Panorama Económico Global (WEO, su sigla en inglés) del Fondo Monetario Internacional (FMI), publicado hoy. La entidad volvió a recortar su proyección de crecimiento para el Producto Interno Bruto del mundo en 2019 a 3,3%, dos décimas menos de lo que preveía en enero y cuatro décimas por debajo de la proyección de octubre.
"Hace un año, la actividad se estaba acelerando en casi todas las regiones del mundo; ahora, mucho ha cambiado", escribió la economista jefe del Fondo, Gita Gopinath, en un comunicado que acompañó al informe.
El FMI estima que este año 70% de la economía del mundo verá un crecimiento desacelerado. El PIB del mundo desarrollado se expandirá 1,8% en 2019, dos décimas menos de lo previsto en enero, y Europa sigue siendo el foco de mayor debilidad: la eurozona crecerá 1,3%, con Alemania expandiéndose 0,8%; Francia, 1,3% e Italia, 0,1%.
Estados Unidos también verá un crecimiento más lento. Tras expandirse 2,9% en 2018, crecería 2,3% este año, dos décimas menos de lo previsto hace cuatro meses. China, por su parte, crecería 6,3%, una décima más de lo proyectado antes, pero por debajo del 6,6% anotado el año pasado.
Panorama latinoamericano
El Fondo redujo en seis décimas su proyección de crecimiento para América Latina y el Caribe este año, desde el 2% reportado en enero a 1,4%. En 2020, la expansión subiría a 2,4%, una décima menos de lo proyectado antes.
En tanto, la previsión para Chile se mantuvo en 3,4% para 2019 y 3,2% en 2020. La de Perú subió una décima a 3,9% en 2019; la de Colombia en dos décimas a 3,5% y la de Brasil bajó en cuatro décimas a 2,1%.
Otra perspectiva que mejoró fue la de Argentina, cuyo PIB se contraería 1,2%, cinco décimas menos que lo proyectado en enero. El próximo año, el país vería crecimiento positivo de 2,2%.
Un capítulo aparte es Venezuela, cuya economía se contraería 25% este año, mucho más del 18% de reducción que experimentó en 2018. Al mismo tiempo, la hiperinflación se acelera: el Fondo proyecta que el ritmo de los precios sea de 10.000.000% este año.
Panorama de riesgos
El WEO advierte amenazas que podrían empeorar las perspectivas en el corto plazo, entre ellas un aumento de las tensiones comerciales e incertidumbre política. Factores relevantes son el proceso del Brexit y los cambios en la política monetaria de Estados Unidos, entre otros.
Ante ello, el FMI señaló que "evitar errores que podrían dañar la actividad económica debe ser la prioridad (...) En todas las economías, es imperativo tomar acciones para subir el crecimiento potencial, mejorar la inclusión y fortalecer la resiliencia".