En medio de una oleada internacional de optimismo que está levantando la cotización de los activos considerados como más riesgosos, como las monedas emergentes, el peso chileno terminó la última jornada de la semana con el pie derecho.
En las primeras operaciones del mercado cambiario, el tipo de cambio anotó una baja de $ 2,5 con respecto al cierre de ayer, ubicándose en $ 707,50.
Con esto llega a su menor nivel en un mes.
Con esto, el peso chileno se acopla a las tendencias internacionales del momento.
A esta hora, la cotización internacional del billete estadounidense cae, profundizando las pérdidas de ayer. El Dollar Index, que lo contrasta con una canasta de monedas, pierde un 0,08% de su valor.
A la par, la mayoría de las principales divisas del mundo emergente ganan terreno. En particular, al avance del peso chileno le aporta el auge del peso mexicano, una de las mayores monedas de América Latina, que tienden a guiar los flujos de inversión hacia la región.
Y no podía faltar el eterno compañero de baile del peso: el cobre. El entusiasmo de los inversionistas también llegó al mercado de materias primas, empujando a los futuros del metal industrial a subir más de 2% en este momento en el mercado de Nueva York.
Estos resultados se dan en una jornada de optimismo en los mercados globales en general, con el apetito por riesgo impulsando también a las bolsas luego de que se dieran señales de acercamiento entre Estados Unidos y China, en el marco de la guerra comercial.
El último episodio del conflicto arancelario es que el presidente estadounidense Donald Trump abriera la puerta a un potencial acuerdo provisorio, además de la decisión de la Casa Blanca de levantar los aranceles a algunos productos del gigante asiático.
Además, ambos países se ven más propensos a sentarse una vez más a negociar, en la que sería la décimo tercera ronda de conversaciones, lo que le da esperanzas a los inversionistas de que ambas potencias puedan llegar a un potencial acuerdo.