La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) publicó, este lunes, el Informe de Endeudamiento 2022, que arrojó que la deuda bancaria en Chile, a junio de 2022, tiene una mediana de 2,1 millones de pesos.
El informe cuyo objetivo es generar una radiografía del endeudamiento de los chilenos arrojó también que los deudores destinan el 16,97 por ciento de sus ingresos mensuales para pagar parte de la deuda, y si quisieran pagar la deuda completa necesitarían al menos tres veces la cantidad de sus ingresos.
Los datos entregados por la CMF son menores a los observados antes de la pandemia, cuando la mediana de la distribución fue de 2,9 millones de pesos en 2019 y 2,5 millones de pesos en 2020, aunque levemente superior a 2021 cuando regían medidas excepcionales asociadas a transferencias fiscales y retiros de fondos de pensiones.
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De acuerdo con el informe, el segmento entre 40 y 45 años es el que exhibe el mayor nivel de deuda ($6 millones), mostrando una alta correlación con decisiones de compra de vivienda.
Según el informe, la deuda representativa crece con el ingreso de la población, es decir, mientras más dinero se obtiene, mayor es la deuda. Por ejemplo, los deudores con rentas sobre $1,2 millones acumulan el 68,3% de la deuda.
En cuanto a la distribución geográfica, las zonas norte y sur del país exhiben indicadores de endeudamiento superiores a los de la zona central, en particular, en regiones que presentan mayores niveles de ingreso medio.
Por género, el número de deudores bancarios es equilibrado entre hombres y mujeres. Sin embargo, la deuda de las mujeres ($ 1,5 millones) es cercana a la mitad de la de los hombres ($ 3,1 millones).
Según los datos entregados por la CMF, alrededor de 320 mil deudores bancarios registran atrasos u obligaciones impagas de uno o más días, lo que representa un 6,1% del total de los deudores.
“El estudio nos revela que la carga financiera mediana creció desde la medición anterior. Sin embargo, sigue estando por debajo de los niveles prepandemia”, detalló Solange Berstein, presidenta de la CMF.
“El porcentaje de ingreso que las personas destinan al pago de deudas actualmente es de un 16,9 por ciento. Esto, en términos de apalancamiento, significa que la deuda total de las personas es de tres veces su ingreso mensual”, continuó.
“Es cierto que un mayor y mejor acceso al crédito les permite a las personas mejorar su bienestar, pero también es cierto que un alto nivel de endeudamiento afecta su capacidad para cumplir los compromisos que han adquirido y los hace más vulnerables frente a situaciones que afectan su situación financiera en general, especialmente cuando vemos un mercado laboral debilitado”, afirmó.