"Solo me corresponde opinar si la contratación aludida corresponde o no a buenas prácticas de gobierno corporativo".
Con esta aclaración, el presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, se refirió a la polémica por la incorporación de Julio Ponce Lerou y su hermano Eugenio como asesores de SQM. Una medida que ocurre a solo meses que se sellara el acuerdo que puso fin al arbitraje que enfrentó a SQM y Corfo por el salar de Atacama y que, precisamente, contemplaba dentro de sus puntos la salida de la familia Ponce del directorio, tras la vinculación del ex yerno de Pinochet en el caso SQM.
"Me parece que no es una buena práctica empresarial en sociedades anónimas abiertas con accionistas minoritarios, que legítimos derechos de accionistas controladores o relevantes, se ejerzan a través de instancias distintas del directorio, comités de directores o junta de accionistas, salvo que en su condición de director (que no es el caso) asume otros roles en condición de asesor", afirmó Larraín Matte a través de una declaración pública.
Por otro lado, en relación al debate respecto de si la decisión de incorporar a Ponce como asesor incumple lo establecido en el acuerdo entre Corfo y SQM, afirmó que "corresponde a las partes determinarlo a través de instancias que el mismo acuerdo establece".
