Wall Street cayó este viernes cuando su principal índice, el Dow Jones, se desplomó 414 puntos (1,8%), marcando la peor semana bursátil desde la crisis financiera de 2008.
El alza de la tasa de interés que anunció el miércoles la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), y los temores por un cierre parcial del gobierno debido al desacuerdo presupuestario entre republicanos y demócratas, desataron los temores de los inversionistas, según analistas de mercado.
Todos los sectores terminaron en rojo, mientras que las pérdidas más pronunciadas afectaron a Goldman Sachs, American Express, Apple, Visa y Walgreens.
Otro factor que ayudó a precipitar aún más el descenso, fueron las declaraciones del asesor comercial del gobierno, Peter Navarro, advirtiendo que sería "difícil" llegar a un acuerdo económico permanente entre Washington y Pekín en la guerra arancelaria.
Con este escenario, las acciones de la Bolsa de Nueva York sumaron tres días consecutivos de vertiginosas caídas, que alimentaron las expectativas de que diciembre termine como uno de los peores meses en décadas.
En el acumulado de la semana, el Dow Jones descendió 6,8%, mientras que el Nasdaq, perdió un 8,3%.
El temor de los inversionistas
Los detonantes que provocaron la caída de esta semana, se suman a la preocupación que han expresado los inversionistas en las últimas semanas de que se produzca una desaceleración económica global.
Los últimos datos sobre la economía China no fueron alentadores para los mercados, mientras que una eventual extensión del conflicto arancelario entre las dos mayores economías del mundo, ha revivido los temores de que el freno se impondrá sobre el acelerador.
Al cóctel anterior se suma la baja en el precio del petróleo, en la medida que la demanda por el crudo ha disminuido, especialmente en países como India y China.
El Dow Jones ha caído 10% desde su máximo en septiembre, borrando todas las ganancias que se habían acumulado en el año.