La fiesta de Wall Street está en suspenso.
El mercado estadounidense borró todas las ganancias que había acumulado en el 2018 cuando este miércoles el índice Dow Jones perdió más de 600 puntos, con una caída de 2,41%.
Pese a las ganancias de este jueves, octubre está a punto de convertirse en el peor mes en la bolsa de Nueva York de los últimos seis años.
Aunque la economía estadounidense vive un período de alto crecimiento y bajo desempleo, los mercados están preocupados por el futuro.
La incertidumbre está influida, coinciden los analistas, por la guerra comercial entre EE.UU. y China, y por el temor de los inversionistas a que la Reserva Federal (FED, por sus siglas en inglés) siga aumentando las tasas de interés.
"Se volvió loca"
El tema del alza en el costo de los créditos ha puesto a la FED en el centro del debate financiero y político.
Tanto así, que el presidente Donald Trump dijo hace unos días que la FED "se volvió loca" por subir "demasiado" los tipos de interés, algo que, en su opinión, puede desacelerar el pujante crecimiento económico de su país.
Esta semana Trump insistió en su argumento al decir que el organismo es la "la mayor amenaza" para la economía estadounidense.
Para echar más leña al fuego, este jueves el vicepresidente de la FED, Richard Clarida, dijo que es probable que vengan más alzas.
Otras causas de la tendencia bursátil negativa de las últimas semanas, señalan expertos, son la crisis económica en Italia y el escándalo por la muerte del periodista Jamal Khashoggi, que ha puesto un manto de incertidumbre sobre Arabia Saudita, líder de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
La alta volatilidad del mercado muestra que "la gente está tratando de entender para dónde van las cosas", dijo Randy Swan, fundador de Swan Global Investments.
¿Tocó fondo la caída?
En una entrevista con CNBC, Nicholas Colas, cofundador de DataTrek Research, apuntó que aún hay espacio para que Wall Street siga cayendo.
"No creemos que la venta de acciones haya acabado", dijo.
En lo que coinciden los expertos es que efectivamente hay incertidumbre en el ambiente.
Economistas, políticos y fondos de inversión tienen los ojos puestos en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que ya parece estar teniendo efectos negativos a uno y otro lado del Pacífico.