Colombia se convirtió en el país de América Latina en el que más crece la compra y venta de bitcoins
Desde estudiantes universitarios hasta grandes inversores se sumaron a esta tendencia.
2017 fue el año del bitcoin en Colombia, según los reportes de sitios especializados que monitorean las transacciones hechas con la criptomoneda.
De hecho, uno de los sitios más grandes de compra y venta de bitcoins de persona a persona, Localbitcoins, indicó que las transacciones hechas con pesos colombianos crecieron 1.200% durante 2017.
Colombia se ubica, de acuerdo a este ranking, en el tercer puesto de los países, en porcentaje, en los que más crecieron los intercambios de moneda local por bitcoins (y viceversa) detrás de China y Nigeria, que superaron el 2.000% y 1.400% respectivamente.
Venezuela aparece en cuarto lugar de la lista con más de 700% de incremento en la compra y venta.
LocalBitcoins confirmó a BBC Mundo que estas cifras están basadas en el tipo de moneda que se usa para la transacción y no necesariamente en el país donde se realiza el intercambio, por lo que pesos colombianos se podrían estar usando para grandes transacciones en otras partes del mundo.
Estas estimaciones ya despertaron las alertas en el gobierno, que insiste en aclarar que el bitcoin no es una divisa válida en Colombia.
Las autoridades temen que detrás de estos grandes movimientos financieros se puedan ocultar actividades ilícitas como el lavado de activos.
A pesar de las advertencias, los expertos consultados por BBC Mundo sugieren que Colombia debe trabajar en una normativa específica porque el uso de la criptomoneda en el país ya es una realidad.
Para novatos y expertos
El fenómeno bitcoin en Colombia crece a tal nivel que ya hay entidades que realizan talleres y seminarios sobre el uso de la criptomoneda.
Una de las entidades que realiza estas actividades es Investopi, una plataforma de educación financiera con sede en Bogotá, que regularmente realiza entrenamientos sobre el uso de bitcoin para novatos y expertos.
Marcelo Granada, el director de Investopi, le explicó a BBC Mundo que en estos cursos participan personas de varios niveles socioeconómicos y con diferentes posibilidades de inversión.
"Vemos gente de todos los estratos y todas las edades. Vemos muchísimas personas que ya tienen fondos importantes de inversión como gente con cantidades limitadas de dinero para invertir", indica el experto.
Una encuesta hecha por Investopi entre 600 personas interesadas en la compra y venta de bitcoins señala que la mayoría de los inversores tiene entre 25 y 44 años.
De ellos, el 44% se declara del sector independiente, el 42% es empleado, 8% viene del mundo de las inversiones y 5% son estudiantes.
Granada señaló que una de las causas del incremento en el uso del bitcoin en Colombia son los altos costos bancarios para las transferencias internacionales y lo complicado que resulta realizarlas.
"Eso hace que si una persona decida enviar dinero a un familiar sea mucho más fácil a través de bitcoin y recibir el dinero también. En Colombia se reciben remesas cada vez más frecuentemente en bitcoins".
Granada añadió que los colombianos tienen la costumbre de buscar alternativas de inversión con bajos montos, por lo que la rentabilidad del Bitcoin es atractiva.
"La gran mayoría de personas invierten buscando rentabilidad en el corto plazo, ese es su mayor anhelo", añade el experto.
Sin embargo, Granada también apuntó usos peligrosos de la criptomoneda como ocultar el dinero para pagar menos impuestos.
Los mercados emergentes
Para el centro de investigación en mercados y tendencias digitales Juniper Research, con sede en Reino Unido, el fenómeno visto en Colombia se replica en otras economías en crecimiento.
Así se lo explicó a BBC Mundo Windsor Holden, director de Pronósticos y Consultoría de la entidad.
"Si miramos las tendencias globales en el comercio de bitcoins descubriremos crecimientos dramáticos en varios mercados, relacionados en parte con el aumento del valor de la criptomoneda en el último año", indicó el experto.
A lo largo de 2017, el bitcoin alcanzó una cotización récord de casi US$20.000, aunque cayó dramáticamente a finales de año hasta un valor de US$13.000.
Pese al desplome, no dejó de ser un año espectacular para aquellos que invirtieron en la criptomoneda.
A inicios de 2017, el bitcoin se cotizaba en apenas US$1.000.
"El incremento de la compra y venta es perfectamente posible en países en desarrollo y mercados emergentes, si consideramos que hablamos de una forma veloz de obtener ganancias", explicó.
En el caso de Colombia, Holden opinó que el rápido crecimiento del bitcoin implica la necesidad de una serie de regulaciones, tomando en cuenta el tipo de transacciones que se pueden realizar con la criptomoneda, el movimiento casi anónimo de recursos y lo difícil que resulta rastrearlos.
El experto añadió que similares desafíos se presentan a otros países de América Latina.
Lo que dice el gobierno
El gobierno colombiano, a través del Ministerio de Hacienda, informó a BBC Mundo que está al tanto del crecimiento del uso del bitcoin "así como ha venido ocurriendo en los demás países de la región" y anunció que por ello es importante monitorear su desarrollo.
"Este fenómeno se puede atribuir a motivos especulativos sobre su valor futuro. El valor de las criptomonedas es altamente volátil ya que estos activos no tienen un valor intrínseco, sino que depende de la demanda del público, la cual a su vez depende de la confianza en sus atributos como medio de pago y depósito de valor", señaló la entidad.
El gobierno expresó su preocupación dado que el carácter anónimo y la dificultad en la trazabilidad de las transacciones de las criptomonedas aumentan el riesgo de que dichos activos sean utilizados para el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.
También advierte sobre la posibilidad de desfalcos, estafas y negocios fraudulentos como los esquemas piramidales, algo que también fue señalado por los expertos consultados por BBC Mundo.
Desde 2014, cuando se advirtió del fenómeno bitcoin en Colombia, el gobierno señaló que no es una moneda en Colombia y, por lo tanto, no constituye un medio de pago.
Eso significa que no se puede usar a la criptomoneda en una transacción con alguna entidad estatal y nadie está obligado a recibir bitcoins como forma de resarcimiento económico.
Sin embargo, como señala Marcelo Granada de Investopi, esta restricción no limita las transacciones entre privados, que es lo que ahora sucede en Colombia.
Proyecciones
En diciembre del año pasado, la empresa Athena Bitcoin anunció la instalación de una red de cajeros automáticos en Colombia para comprar y vender la criptomoneda aprovechando las tendencias actuales.
Para Windsor Holden, de Juniper Research, es posible que este año se vuelva a producir un "notable aumento" del uso del bitcoin en economías como la colombiana si las fluctuaciones del valor de la criptomoneda vuelven a ir para arriba.
Granada, por su parte, indicó que el interés del colombiano por este tipo de transacciones no ha dejado de crecer, por lo que aquellos que opten por esta clase de inversiones deben tener en cuenta los riesgos que esto implica.
Advierte que el bitcoin es un instrumento financiero de altísima volatibilidad y alta especulación.
"Tampoco se trata de vender el carro e hipotecar la casa para comprar bitcoins sin entender que hay riesgos", concluye.