Banco Central posterga para 2026 retorno a la meta de inflación de 3% y sube piso del crecimiento para el año
Hasta 2026 habrá que esperar para ver el retorno de la inflación a la meta de 3%, según proyectó el Banco Central en el Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio, que esta mañana presentará ante la comisión de Hacienda del Senado.
Esto implica que los precios locales tendrán un incremento que se considera “importante” durante 2025.
En este cuadro de estimaciones, dijo el ente emisor, “incide principalmente el impacto del shock de oferta asociado a la Ley de Estabilización de las Tarifas Eléctricas. El escenario central de proyección muestra que este fenómeno aumentaría en 1,45 puntos porcentuales la inflación proyectada a junio de 2025”, precisó.
Considerados todos los cambios del escenario, el IPoM estimó que la inflación anual cerraría 2024 en 4,2%, lo que se compara desfavorablemente con el 3,8% planteado en marzo; y al año siguiente, el resultado sería de 3,6%, que era 3% hace tres meses. Así, el alza de precios internos promedio sería 1,1 puntos porcentuales mayor durante el presente ejercicio.
A nivel de actividad, el IPoM prevé que la actividad crecería entre 2,25% y 3%, rango que representa una mejora respecto al piso de 2% previsto en marzo y la ratificación del techo de 3% ya anticipado.
En este punto, el banco recordó que en la medida que avanza el año, el ancho del rango de proyección de expansión del Producto Interno Bruto (PIB) se va reduciendo en 25 puntos base.
El reporte señaló que el ajuste de la proyección para 2024 se relaciona con mejores datos efectivos por el lado del gasto y los alcances iniciales del alza del precio del cobre.
A mediano plazo, los efectos de este último elemento se compensan con el impacto negativo que tienen los reajustes de las tarifas de electricidad en el ingreso disponible de los hogares. Esto incide en la mantención del rango de crecimiento entre 1,5% y 2,5% para los próximos dos años.
La demanda interna, por su parte, anotaría una expansión de 1,8% anual en el ejercicio actual, lo cual significa una mejora con respecto al IPoM de marzo (1,6%). En los próximos dos años crecería un 2,6%. Mientras que el consumo aumentará en un 2,8% este año -anteriormente se preveía un 2%-, y un 1,7% y un 2,3% en 2025 y 2026, respectivamente.
El Central destaca en el IPoM que la economía local ha evolucionado en línea con lo proyectado en el informe de marzo y que la actividad ha ido retomando una senda de crecimiento coherente con su tendencia, con un desempeño de la demanda algo mejor que lo esperado.
El informe resaltó que, tal como se había anticipado en marzo y como fue confirmado por los datos de los Imacec de marzo y abril, parte del mayor crecimiento de inicios de año provino de factores de oferta que han ido revirtiéndose.
A nivel externo, expresó que los desarrollos siguen dominados por el ajuste de las expectativas para la política monetaria en Estados Unidos, las proyecciones de crecimiento mundial tienen ajustes menores, aunque se debe tener presente que varias economías han mostrado un desempeño algo mejor que lo previsto.
Una de las noticias importantes de los últimos meses, destacó el reporte, ha sido el alza del precio del cobre, que responde a factores transitorios y otros persistentes.
El escenario de proyección del banco considera un precio del metal más elevado que el estimado en marzo. Así, se utiliza como supuesto que el precio del cobre promediará US$4,3 la libra entre 2024 y 2026 (US$ 3,85 en marzo).
“Esto impactaría positivamente en la inversión, las expectativas de los agentes y el saldo de la cuenta corriente”, afirmó el IPoM.
En esa línea, el ente autónomo corrige al alza su proyección para la formación bruta de capital fijo (FBCF) tanto para este año como para los dos siguientes. Si en el IPoM de marzo se esperaba una contracción de 2% para la FBCF en 2024, ahora se prevé que sólo caerá un 0,3%.
En 2025, la inversión anotará una expansión de 5,4% y en 2026 de 2,8%. En el reporte anterior se pronosticaban alzas de 3% y 1,9%, respectivamente.
El análisis también destaca que la menor profundidad del mercado de capitales nacional, producto de los retiros de ahorros previsionales materializados, sigue afectando la economía, principalmente por su impacto en la disponibilidad de financiamiento local de más largo plazo.
¿Tasas a la baja?
De acuerdo con el IPoM, y ratificando lo expresado tras la reunión monetaria del martes, la tasa de interés ya habría acumulado durante el primer semestre el grueso de los recortes previstos para este año.
Así y todo, el escenario central del IPoM de junio considera que la TPM seguirá reduciéndose durante el horizonte de política monetaria, a un ritmo que tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación.