AFP
La Fiscalía de Tokio acusó formalmente este lunes a Carlos Ghosn de disimulación de ingresos recibidos en Nissan durante cinco años, informaron medios japoneses, tres semanas después del sorpresivo arresto del presidente de la alianza de automóviles con Renault y Mitsubishi Motors.
Por otra parte, la justicia prolongó la detención preventiva del presidente de Renault Carlos Ghosn, sospechoso de haber disimulado sus ingresos entre 2015 y 2018, informaron los medios de prensa japoneses.
Ghosn, de 64 años y expresidente de Nissan, está detenido desde su arresto, el 19 de noviembre.
La justicia lo acusa de no haber declarado unos 5.000 millones de yenes (44 millones de dólares) entre 2010 y 2015.
Las autoridades decidieron prolongar la detención preventiva por sospechas de que ocultó otros 4.000 millones de yenes en los últimos tres años.
La ley japonesa permite que los sospechosos sean detenidos en varias ocasiones por diferentes acusaciones, lo que permite a los fiscales interrogarlos durante periodos prolongados.
Este lunes era el último día en que los fiscales podían mantener a Ghosn y a su brazo derecho, Greg Kelly, detenidos antes de liberarlos o inculparlos formalmente.
La nueva detención preventiva permitirá interrogarlo durante 22 días más.
Además de los cargos contra Ghosn, los fiscales también acusaron a Kelly y a Nissan, según medios locales, ya que la fiscalía considera que la responsabilidad de la empresa, que fue la que proporcionó los informes incriminatorios a las autoridades financieras, también se vio comprometida.