El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó este martes mediante un comunicado de prensa que el Banco Central de Chile le solicitó al organismo una Línea de Crédito Flexible (FCL, por sus siglas en inglés) de dos años por un monto de US$ 23.800 millones.
Frente a este anuncio, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones señaló que "esta línea de crédito flexible que el Fondo Monetario Internacional anuncia hoy (martes) es una línea de crédito precautoria solicitada por y para el Banco Central de Chile, que le permite, según necesidad, complementar sus reservas internacionales de forma tal de acometer de mejor manera su mandato legal establecido en la Constitución y en su Ley Orgánica Constitucional".
En sus declaraciones recogidas por el Diario Financiero agregó que "es importante dejar explícito y ser extremadamente claro que esta línea del Fondo Monetario Internacional no es un préstamo al gobierno de Chile, y por ende, no está destinada a financiar gasto público".
Sobre el préstamo, la autoridad destacó que "la línea de crédito puede ser visto como un seguro adicional a la sólida posición que el Banco Central ya tiene para enfrentar choques externos, particularmente ante un escenario global volátil"
"Es una facilidad precautoria que hay que destacar que está solo disponible para economías con marcos robustos de política macroeconómica y con un compromiso de mantener estos marcos en el tiempo, por lo que en definitiva, es un voto de confianza sobre la robustez de nuestra economía", remató Briones.