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[VIDEO] Tocopilla después del aluvión: Así se ve zona de alto riego desde un dron

[VIDEO] Tocopilla después del aluvión: Así se ve zona de alto riego desde un dron
T13
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Las imágenes dan cuenta de los factores que determinaron los aluviones en la ciudad de Tocopilla el pasado 9 de agosto.

Este vienes, el Centro de Investigación para la Gestión Integrada de Desastres (Cigiden) reunió a los principales organismos de planificación, protección civil e infraestructura, para analizar las imágenes captadas por un dron que dan cuenta de los factores que determinaron los aluviones en la ciudad de Tocopilla el pasado 9 de agosto.

“Chile ha debido enfrentar diversas amenazas de origen natural durante los últimos cinco años. De ahí la importancia de discutir con todos los actores el rol de la planificación integrada en la reducción de riesgos de desastres y el fortalecimiento de las resiliencia urbana”, destacó Rodrigo Cienfuegos, académico de Ingeniería UC y director del Cigiden.

Para el director del Observatorio de Ciudades UC e investigador principal de Cigiden, Roberto Moris, Chile debe crear un sistema para responder eficazmente frente a un fenómeno natural extremo.

“Los aluviones del norte demostraron la falta de preparación y respuesta que tenemos ante estas amenazas climáticas. También la poca planificación que existe para mitigar los impactos en zonas de quebradas”, precisó el especialista.

Imágenes de Tocopilla captadas por el Centro de Investigación para la Gestión Integrada de Desastres (Cigiden).

Resultados del Estudio

El estudio sobre los efectos del aluvión en Tocopilla estableció que las cumbres en la ciudad actuaron como un muro que atrapó las nubes provenientes del Océano Pacífico, precipitando los 29,4 milímetros de agua registrados ese día en la zona.

En las imágenes captadas por el drone se apreciar cómo la inclinada pendiente de los macizos de la Cordillera de la Costa en ese sector provocó que el agua caída escurriera rápidamente, arrastrando consigo la carga de sedimentos que provocó la pérdida de vidas y los graves daños registrados en la ciudad.

"Las primeras evidencias de acarreo de sedimentos las encontramos a cinco kilómetros al interior de la desembocadura de la quebrada Barriles. Esto nos indica que la lluvia fue netamente costera y concentrada en la vertiente occidental de la Cordillera de la Costa", explicó Gabriel González, investigador de la UCN y del Cigiden, quien encabezó el trabajo en terreno.

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