Los obispos de la iglesia chilena fueron convocados a reuniones con el Papa Francisco en el Vaticano a parttir del próximo lunes 14 de mayo, sin embargo, la serie de citas podría tener una ausencia clave: el arzobispo emérito de Santiago, Francisco Javier Errázuriz.
Según confirmó la panelista de Tele13 Radio Andrea Vial, Errázuriz —que ha sido sindicado como uno de los principales encubridores de los abusos sexuales de Fernando Karadima por las propias víctimas— no iría a Roma por razones que todavía son poco claras. Tampoco lo harían los otros obispos eméritos Bernardino Piñera y Jorge Medina dada su avanzada edad.
Fuentes cercanas al Vaticano reportan que el Papa Francisco está sorprendido con los relatos de José Andrés Murillo, Juan Carlos Cruz y James Hamilton sobre Errázuriz, personero de confianza que había sido convocado al G-9, un grupo asesor para reformar la curia.
El propio Hamilton ha emprendido duras ofensivas contra Errázuriz. En Tele13 Radio afirmó hace algunos días que le gustaría que él "perdiera su influencia nefasta en la Iglesia y que sutil o no sutilmente quedara rebajado o fuera de los círculos de poder de la iglesia".
Primeros viajes
Mientras se define la situación de Errázuriz, los obispos activos (que están al mando de una diócesis o arquidiócesis) comenzaron sus viajes a Italia. De acuerdo a una fuente de la Conferencia Episcopal citada por la AFP 31 de los 32 confirmaron su asistencia tras la "invitación abierta" del Papa Francisco.
El único ausente se este grupo será Andrés Arteaga, obispo auxiliar de Santiago, retirado de las actividades públicas por razones de salud. Cada uno se paga su propio pasaje y su estadía, de acuerdo a la fuente.
