"Es un miedo que no se quita" asegura a T13 una de las profesoras que fue víctima del asalto que provocó el operativo policial en que posteriormente murió Camilo Catrillanca, un joven de 24 años que recibió un disparo en la cabeza.
Según antecedentes preliminares, fueron tres encapuchados los que encabezaron el asalto a las profesoras de la escuela Santa Rosa, a quienes les quitaron los tres vehículos en que se movilizaban cuatro docentes y dos menores de edad.
"Yo estoy todo el día con esa voz imaginándome, recordando cuando salta y nos empieza a gritar y a gritar con su escopeta aquí. Es una voz que no se quita, no sale de la cabeza, no puedo dormir, no como", aseguró la profesora.
Continuó el relato: "Del lado derecho aparece un tipo, todo de negro, con mucho garabato, tratándonos pésimo con una escopeta muy grande y nos empieza a gritar con garabatos '¡para el auto...!'".
Cuando las bajaron del auto, les dijeron que se tiraran al suelo boca abajo y "en eso algo pasaba atrás en los otros autos, y él se va para atrás, como mi tía tenía el teléfono a mano le dije que llame a Carabineros, y me dijo que no podía porque atrás había otro sujeto con un hacha".
Finalmente la profesora sentenció: "Lo que más me da pena y me da rabia es que no nos crean, que hablen de un montaje".