El vicepresidente Mario Fernández rechazó decretar estado de catástrofe en la zona afectada por el sistema frontal, que ha dejado miles de damnificados entre las regiones de Atacama y Coquimbo.
"La declaración de un estado de excepción constitucional de catástrofe no procede, para ello se requiere un estado de calamidad pública y no hay calamidad pública que la Constitución exige", señaló Fernández.
Esta determinación se realizó luego de que el vicepresidente arribara este sábado a La Serena. Desde ahí, la autoridad inició un sobrevuelo por los diferentes poblados afectados por las intensas lluvias que desde el jueves han caído en la tercera y cuarta región.
En la instancia también se reunió con el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, quien está realizando despliegues en distintos sectores, para normalizar vías de acceso e infraestructura dañada por consecuencias naturales.
Sin embargo, Mario Fernández no descartó que el Ejecutivo establezca un estado específico en algunas zonas, para que alcaldes puedan acceder a financiación extra para reparar o reestablecer servicios.
Suministro en Ovalle
La segunda autoridad del Gobierno pudo apreciar que uno de los puntos críticos de la emergencia es en Ovalle, dado a los problemas que puede presentar el suministro de agua tras la rotura de una de las paredes que contiene el Embalse Recoleta.
En la tarde de este sábado, la empresa Aguas del Valle y el MOP reestablecieron el servicio de agua potable, que hasta el minuto está funcionando por una vía alternativa de abastecimiento.