El Tribunal de Familia de Calama decidió que los alumnos, que no obedecieron la medida de no usar celulares a su liceo, deben usar una chapita contra la violencia escolar además de pintar un mural al interior del establecimiento.
Se trata de 38 alumnos del Liceo Jorge Alessandri Rodríguez, establecimiento que prohibió el uso de celulares en mayo de este año tras recibir una denuncia de ciberbullying.
"La mayoría de los casos de incumplimiento de la norma eran situaciones donde los niños necesitan comunicarse con sus padres. Ninguno fue sorprendido utilizando redes sociales, chat o haciendo mal uso de los teléfonos", detalló Jorge Saavedra, juez titular del Juzgado de Familia de Calama, a la Estrella del Loa.
"Se determinó que los alumnos deberán portar una chapita contra la violencia escolar de forma obligatoria por al menos 30 días y entregarle esto a sus mejores amigos. Además, todos deberán colaborar (en la confección) de un grafiti que se realizará en un muro del establecimiento, también relativo a las agresiones escolares", explicó el juez.
