Tres personas murieron durante la tarde del martes tras caer al interior de una cuba con 400 litros de ají, en una fábrica familiar ubicada en Talca, en la región del Maule.
Además, un menor de 14 años, quien también cayó al interior del recipiente, fue trasladado al Hospital Regional de Talca en riesgo vital.
Según los primeros antecedentes, una de las cubas donde se procesa el ají habría emanado algunos gases, provocando el desmayo de las víctimas.
Un primer adulto se habría intoxicado, seguido por su cuñado y finalmente su madre –una adulta mayor– quienes habrían llegado al lugar para auxiliarlo.
¿Cómo se explica la intoxicación en una fábrica de ají?
Aunque la investigación sigue en curso, la toxicóloga y profesora de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile Laura Borgel sospecha del ácido sulfhídrico, aunque también va más allá.
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“Este vegetal contiene capsaicina, que es un compuesto irritante de mucosas y ojos, el que en altas concentraciones puede provocar edema de vías respiratorias, incluidos los pulmones. A eso hay que sumar que si el material vegetal está degradado genera gases de descomposición, como los sulfuros, los cuales son asfixiantes, ya que forman sulfohemoglobina, que es un tipo de hemoglobina que no tiene afinidad por oxígeno, causando la falta de oxígeno a nivel celular y eventualmente la muerte”, explicó a Las Últimas Noticias.
Por su parte, el ingeniero químico Patricio Ponce también señaló al periódico que –según lo que él cree– lo que provocó la muerte de las tres personas “es un accidente previsible, pero común, especialmente en pequeñas plantas donde se procesan productos orgánicos, pues muchas veces, al ser emprendimientos familiares y semi artesanales, los operarios desconocen los peligros de almacenar vegetales en espacios confinados, que permiten la acumulación de gases tóxicos, en este caso ácido sulfhídrico, el que puede intoxicar a un adulto en muy poco tiempo”.
