La falta de turismo debido a la pandemia de COVID-19, ha puesto en una difícil situación a los habitantes de Rapa Nui.
Esta situación motivó a la comunidad Mau Henua a destinar 43 hectáreas para el cultivo de la tierra y la crianza de animales, retomando de esta forma algunas prácticas ancestrales de Rapa Nui para conseguir alimentos.
Por años los antiguos isleños vivieron del cultivo de tubérculos, plátanos, caña de azúcar y calabaza, entre otros. A lo anterior se sumaba la práctica de la pesca y la crianza de gallinas.
La iniciativa se plantea como un programa de ayuda social en la isla ante la paralización de las actividades turísticas en los parques que administra Mau Henua, donde regularmente miles de visitantes concurrían a visitar los Moai.
El programa de autoabastecimiento considera retomar la pesca, la crianza de chanchos y pollos; y el cultivo papas, lechugas, camote, y cebolla. Posteriormente, estos alimentos se distribuyen a costos muy bajos, para así permitir la continuidad del programa.
Desde Mau Henua indicaron que "somos una cultura que vivía de la pesca y del cultivo y la crianza de animales, por esta razón estamos en condiciones de sobrevivir a los efectos del COVID-19 recuperando las prácticas ancestrales y favoreciendo al pueblo Rapa Nui".