Quién es el taxista colombiano que vivía en Cerrillos y por el que 17 agentes del FBI viajaron para extraditar
17 agentes de FBI participaron en extradición de taxista colombiano
17 agentes de la policía federal de Estados Unidos (FBI) participaron en la extradición de Pedro José Silva Ochoa, un taxista colombiano que vivía en Cerrillos, región Metropolitana, y que era altamente buscado internacionalmente por participar en el secuestro de dos militares estadounidenses.
El sujeto fue extraditado en un avión Boeing 757 junto a 17 agentes que viajaron exclusivamente para concretar el traslado del individuo hasta Miami, en Estados Unidos.
"Se determinó que el extraditable se encontraba en Chile, lo que generó que Estados Unidos solicitara la extradición de esta persona. Fue en este contexto que Interpol Santiago, y gracias al trabajo colaborativo de Interpol Washington, lograron ubicar y detener a este imputado colombiano", señaló subcomisario Alex Varela.
El individuo fue puesto a disposición de las autoridades judiciales de Estados Unidos, donde le espera una condena cercana a los 60 años.
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La historia del taxista colombiano
El individuo participó en el secuestro y asalto de dos miembros del ejército de Estados Unidos en Colombia. El sujeto habría trasladado en su taxi a los norteamericanos, para robarle sus pertenencias y el dinero de sus tarjetas de crédito.
"En el año 2020 formaba parte de una banda criminal, en la ciudad de Bogotá, en Colombia, que secuestró, golpeó y robó a dos ciudadanos norteamericanos que se encontraban trabajando como miembros del ejército estadounidense", detalló el subcomisario Alex Varela.
Las funciones de los miembros del ejército le otorgaban la calidad de personas internacionalmente protegidas, por lo que se inició la búsqueda del individuo.
Tras el secuestro a los miembros del ejército, el individuo se escapó de Colombia e ingresó a nuestro país en un paso fronterizo no habilitado, con una identidad falsa y trabajando en aplicaciones de transporte.
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Meses después se determinó que también participó en otro delito: junto al grupo, engañaron y drogaron a tres personas colombianas, donde una de las víctimas falleció semanas después debido a la intoxicación que sufrió por la clonazepam que utilizaron los individuos.
