Marcelo Albornoz: Quién era el juez suspendido de la Corte de Rancagua que murió este miércoles
Marcelo Albornoz: Quién era el juez suspendido de la Corte de Rancagua que murió este miércoles
Este miércoles se confirmó la muerte de Marcelo Albornoz, uno de los jueces de la Corte de Apelaciones de Rancagua que fue suspendido el martes por la Suprema en medio de un escándalo de presunta corrupción.
Albornoz asumió su cargo en el tribunal de segunda instancia en abril de 2017, luego de haber ejercido como funcionario suplente.
En lo últimos meses, se había visto envuelto en cuestionamientos por su participación en la polémica decisión de revocar la prisión preventiva contra el ex canciller del Arzobispado de Santiago, Oscar Muñoz, quien es investigado por presuntos abusos sexuales a menores de edad.
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En este caso, la Corte de Apelaciones anuló la medida cambiándola en septiembre de 2018 a arresto domiciliario nocturno.
Tanto Albornoz como Emilio Elgueta, otro de los suspendidos, eran investigados por supuestas faltas a la probidad y eran miembros de la Logia Masónica Jorge Washington N° 56 de Rancagua, que se creó en 1919.
Según antecedentes de La Tercera, fue en esta institución donde conoció a Luis Arenas, doctor y líder de una red dedicada al tráfico de fertermina que fue condenado en abril de 2018 por sicotrópicos.
En marzo de 2018, Albornoz fue designado como el jefe de la carrera de Derecho en la Universidad La República de la Sede en Rancagua. En esa ocasión fue el mismo ministro Emilio Elgueta quien le dio las palabras de benvenida.
"Para esta Corte es un orgullo tenerte acá, de recibirte, y no dudamos de tu capacidad, de tus conocimientos y esperamos, como ya te conocemos, que sigas en la misma senda, en la senda de la sencillez, del conocimiento y del aporte", afirmó en la instancia Elgueta, según consigna el sitio web de la casa de estudios.
En respuesta a las palabras de su amigo y colega en dicha oportunidad, Albornoz aseveró "que un buen juez no es el que dicta resoluciones o sentencias muy elaboradas, sin consistencia o con mucha retórica o mirando lo que dicen otros. Creo que el mejor juez es el que ejerce su ministerio con eficiencia, eficacia y prontitud, solucionando realmente los problemas de quienes recurren a su estrado".
